«Un retroceso no puede considerarse nunca una victoria». Con estas palabras el secretario de Organización del PSOE, Óscar López, ha valorado los resultados obtenidos por su partido en Cataluña con los que, además de dejar de ser la segunda fuerza política, ha cosechado los peores datos de su historia.
López ha destacado que el resultado es «superior» a las expectativas y que el PP se queda como cuarta pese a aspirar a ser la segunda. Por todo ello, ha feliciatado expresamente al PSC y a Navarro por su esfuerzo para hacer llegar un mensaje «de sensatez y convivencia».
Con todo, ha centrado su intervención en analizar los resultados obtenidos por CIU y Artur Mas quien, ha asegurado, «ha dividido España de forma injustificada». «Los catalanes le han dado en las urnas la lección de sensatez que requería su comportamiento de los últimos años», ha manifestado.
Así, ha subrayado el «excepcional castigo» que los ciudadanos han propinado al presidente de la Generalitat por su «aventurerismo».
En este sentido también ha manifestado su «preocupación» y la de su partido a ver que el «mensaje radical» que ha introducido Mas haya beneficiado a las «posturas más radicales».
López ha reconocido además su «preocupación» porque del debate abierto por Mas se han beneficiado las opciones «radicales», y ha pedido por ello una reflexión sobre la apertura de procesos que no benefician la moderación ni la convivencia.
La Comisión Ejecutiva Federal del PSOE analizará este lunes los resultados de las elecciones catalanas sin la presencia de Pere Navarro, que no forma parte de ella y que presidirá en Barcelona la reunión de la dirección del PSC.