Los libros que marcaron el cine de J. A. Bayona: «Necesitamos la mentira para explicar la realidad»
El cineasta español, que estrena el 15 de diciembre 'La sociedad de la nieve', basada en el libro de Pablo Vierci, nos cuenta la importancia de la literatura en su obra
La aventura de rodar 'La sociedad de la nieve', una 'performance' para viajar al corazón helado de las tinieblas
'La sociedad de la nieve', de J. A. Bayona, suma 13 nominaciones a los premios Goya 2024
![Juan Antonio Bayona posa para 'ABC Cultural' en la biblioteca del hotel María Cristina de San Sebastián, donde desgranó las claves de 'La sociedad de la nieve'](https://s1.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2023/11/30/1471815030-knZB-U607899486833YE-1200x840@abc.jpg)
Aún no ha olvidado aquella sensación. Fue con 'Un pez gordo' (1998), la novela de Daniel Wallace. Cerró la última página y no pudo reprimir la desilusión. «Estaba muy triste de saber que esa película la iba a hacer ya otro director». La ... película era 'Big Fish' (2003), y el director, Tim Burton; pero el recuerdo sirve para dibujar la ambición de un joven Juan Antonio Bayona (Barcelona, 1975), con ganas de desbordar las fronteras del cine español y de la propia imaginación. Desde siempre, su obra ha estado atravesada por los libros, de donde han nacido alguno de sus grandes proyectos y, también, sus primeros trabajos como cortometrajista.
Las letras han alimentado su cámara y llenado su ojo de narrador, y ahora que estrena 'La sociedad de la nieve' (que, obvio, parte del libro de Pablo Vierci) habla con ABC Cultural de sus lecturas, esas en las que se sumerge como ávido lector para salir a respirar como cineasta.
«Cuando hice la reforma de mi casa, el arquitecto llamó al proyecto 'La librería', por todos los libros que había», cuenta J. A. Bayona, que muestra en la pantalla de su móvil una foto de su salón, donde los libros desbordan el espacio. Dominan los de cine -«muchísimos», recalca- junto a una buena colección de libros de arte y pintura -«heredé la afición de mi padre»- y, también, mucha novela de ficción. «El director de fotografía Pedro Luque vino un día a mi casa y me dijo que ahí tenía conocimiento para tres vidas, pero que no iba a poder leer toda la biblioteca entera. Eso me impactó», reflexiona durante un milisegundo Bayona, que responde a ritmo de metralleta, como si el tiempo se le agotara entre cada silencio.
Grandes nombres
Antes de descubrir los autores que lo han inspirado, antes incluso de que desgrane cómo funcionan en él los resortes de la ficción, hay que viajar a sus orígenes. Cuando Juan Antonio no era todavía Bayona y ya quería ser Spielberg. Dicho de otro modo: cuando Juan Antonio no era más que otro estudiante de la Escuela de Cine de Cataluña que miraba tras la cámara desde el mismo lugar que lo ha hecho siempre el estadounidense. No es una exageración: su primer trabajo, 'Mis vacaciones', que rodó como proyecto final del curso al que sus padres lo enviaron apurando hasta la última moneda del bolsillo, recuerda a las películas más luminosas del rey Midas de Hollywood. Juan Antonio terminó por convertirse en J. A. Bayona, el rey de la taquilla española; un autor que, como aquellos del Nuevo Hollywood, atrapó al público haciendo el cine que le gustaba, ese que es capaz de epatar desde lo más profundo de la emoción.
![Imagen principal - Juan Antonio Bayona posa rodeado de libros en el hotel María Cristina de San Sebastián. En la foto izquierda, un momento del rodaje de 'La sociedad de la nieve'](https://s1.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2023/11/30/1471814982-knZB--758x470@abc.jpg)
![Imagen secundaria 1 - Juan Antonio Bayona posa rodeado de libros en el hotel María Cristina de San Sebastián. En la foto izquierda, un momento del rodaje de 'La sociedad de la nieve'](https://s2.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2023/11/30/LSDLN_17022022_quimvives_V__0836(1)-knZB--464x329@abc.jpg)
![Imagen secundaria 2 - Juan Antonio Bayona posa rodeado de libros en el hotel María Cristina de San Sebastián. En la foto izquierda, un momento del rodaje de 'La sociedad de la nieve'](https://s1.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2023/11/30/1471815029-knZB--278x329@abc.jpg)
Y esa emoción la encontró, casi siempre, en los libros. Por su filmografía se cuelan Patrick Ness, J. D. Salinger, J. R. R. Tolkien... Pero es que cuando mira a la realidad, como ha hecho ahora con el caso del famoso accidente de avión que se estrelló en los Andes y cuyos supervivientes resistieron 72 días en un infierno de nieve, se apoya en lo escrito. A veces incluso se cruzan las historias: leyendo el libro de Vierci en 2011 surgió el título de 'Lo imposible', la película en la que narró el maremoto del sudeste asiático a partir de la versión de la superviviente española María Belón.
Cuando la literatura no ha salpicado su guion, lo ha hecho en su forma de narrar. «El primer libro que me impactó de verdad fue 'Drácula', de Bram Stoker. Tendría como 10 años cuando lo leí. Ahí ya estaba el terror, que es algo que desde pequeño me ha marcado, y recuerdo que me impactó ver una vez en un informativo de TVE una escena del Drácula de Frank Langella bajando boca abajo. Luego yo lo referencié en 'Jurassic World'». Y promete que le encantaría, «sin dudar», firmar una adaptación del vampiro más popular de todos los tiempos.
«Obsesionado» por la literatura
«Me empecé a obsesionar con la literatura con 'Un monstruo viene a verme' para intentar entender los resortes de la narrativa -descubre Bayona-. Comencé a leer sobre los cuentos de hadas, leía a Bruno Betelhán hablando de la psicología detrás de esos cuentos. Y sigo obsesionado. El tener ese conocimiento sobre cómo funcionan los resortes de la narrativa me ayuda mucho a entender las historias. Y todavía sigo leyendo para intentar entenderlo todo», resume un creador que, con su segundo cortometraje, 'El hombre esponja' (2003), ya se atrevió a firmar una libérrima adaptación del relato de Salinger 'El hombre que ríe'. De nuevo, sus ganas de mirar más lejos, más alto.
Apenas hay referencias al autor de 'El guardián entre el centeno' en aquel trabajo, más allá del corpus del propio guion. Comprar derechos para adaptar a los grandes de la literatura no era una opción para quien por entonces no era más que un joven egresado de la ESCAC con un corto en su mochila y una filmografía donde lo que abundaban eran videoclips de OBK, Camela y Ella Baila Sola. Ahí, en esos rodajes vertiginosos de un puñado de días con los artistas más populares del momento perdió el miedo a los platós y ganó el pulso para coger la cámara con fuerza. Tanto consiguió que apenas cuatro años después, con 32 primaveras recién cumplidas, estaba recogiendo siete premios Goya, incluido el de mejor director novel por 'El orfanato'. Aquel no fue un debut: se consagró con la ópera prima. De pronto, tenía a todo el cine español (y al público) embelesado con él. Fue la opción de la Academia española en los Oscar y su debut recaudó más de 80 millones de euros en todo el mundo.
«El ser no es un sustantivo, es un verbo. Tú nunca eres la misma persona porque estás constantemente cambiando. Siendo»
Juan Antonio Bayona
Director de 'La sociedad de la nieve'
Desde entonces todo cambió. O, en realidad, todo evolucionó. «El ser no es un sustantivo, es un verbo. Entonces, tú nunca eres la misma persona porque estás constantemente cambiando. Siendo», corta Bayona, que desde 'El orfanato' hasta hoy, y de mano de su productora y socia Belén Atienza, se ha hecho con un puñado de derechos de obras para adaptar. Es una forma -quizá, la mejor- de tener siempre en el cajón grandes proyectos para desarrollar. El más cercano en el tiempo será, si nadie lo impide, 'A sangre y fuego', la obra magna de Manuel Chaves Nogales que llevará a la gran pantalla la próxima temporada. También tienen entre manos otra adaptación, una que Bayona define como «un clásico de la literatura» pero de la que no se atreve a decir nada más. «Es con un gran estudio…». También se calla el nombre de uno de los libros que ha leído recientemente y del que le gustaría hacerse con los derechos -«si se enteran van a subir el precio»- y, al rato, varios minutos después, dejará a medias la frase que en ese momento estaba diciendo porque en su pensamiento a borbotones le acaba de llegar a la cabeza otro proyecto que guarda en el cajón: «Ahora que me acuerdo, estamos desarrollando una historia original de terror también».
Sí. Hablará de 'Los náufragos del Batavia: anatomía de una masacre', de Simon Leys, el (pen)último libro que ha leído. Y se explayará, y mucho, en hablar de Truman Capote y de Chaves Nogales. «'A sangre fría' es otro de esos libros que me impactaron muchísimo, y mira, tiene que ver un poco con esta cosa de crónica que tiene 'La sociedad de la nieve'. Hay algo de acercarse a la realidad de esa forma que está en esta película». Y celebra también al gran periodista español, «que lo hizo mucho antes que Capote, por cierto». «Yo los comparo mucho, me recuerdan mucho en la forma de mirar que tienen». ¿Cómo adaptar 'A sangre y fuego'? «Pues estamos ahí. Nos ha costado diez años encontrar la manera de contar esa historia. Ahora estamos viendo cómo abarcarlo... Yo creo que «abarcar» es la palabra. El reto es ese «abarcar» todo lo que quiere contar Chaves Nogales en una película de dos horas», sentencia.
La ficción y el asombro
El viaje de la literatura a la pantalla de J. A. Bayona es, en realidad, un viaje solo de ida. «Escribí algún relato por obligación en la escuela, pero yo siempre he sido de contar cosas con la cámara y con el lenguaje del cine. Eso sí que me obsesiona, contar una historia con la cámara», apunta. Por eso, la primera imagen marcada a fuego en su memoria es de la película 'Superman'. «Recuerdo un plano de Superman volando... Desde entonces me es muy difícil separar el cine de esa idea de lo que yo llamo el asombro, el quedarse con la boca abierta por el espectáculo de la pantalla. Y el asombro se puede conseguir con una historia real. Porque es lo que uno experimenta cuando una ola pone tu mundo boca abajo o cuando un avión se cae en las montañas. Es cuando lo ordinario se vuelve extraordinario».
«Escribí algún relato por obligación en la escuela, pero yo siempre he sido de contar cosas con la cámara y con el lenguaje del cine»
Juan Antonio Bayona
Cineasta
Y aquí, en ese punto, su verbo fluidísimo, su mover de manos hiperactivo, sus ojos atentos a todo lo que pasa, se detienen en seco, como si hubiera llegado a una revelación. O, en su lenguaje, como si la cámara comenzara a apuntar al cielo en un suave paneo y los rayos de sol se cuelan por el objetivo hasta que toda la pantalla se funde en un blanco total: «Fíjate, a mí la fantasía no me interesa per se. Yo siempre, para conectar con la fantasía, necesito que haya un pozo psicológico debajo. Que haya un lugar donde tú te puedas conectar a ti mismo en la historia». Y esto lo dice un tipo que se ha atrevido a adentrarse en los mundos de Tolkien, que ha adaptado a Patrick Ness y que, para su primera aventura en la industria americana, eligió la serie 'Penny Dreadful', plagada de fantasía, literatura y mucho, muchísimo asombro.
La vida son «contradicciones». Quizá por eso en 'Un monstruo viene a verme' tiró de un recurso tan literario como la metáfora para hablar de la muerte y, ahora, en 'La sociedad de la nieve', la muerte, tan fría en la montaña, aparece de forma cruda, nunca mejor dicho. «Fíjate -lo usa casi como coletilla- que hay una frase que decía uno de los supervivientes que me gustaba mucho: «La realidad no alcanza, solo soñarlo». Lo escribía en el momento en el que les cae un alud, donde muchos tuvieron experiencias cercanas a la muerte, otros hablan de viajes astrales... Necesitamos la mentira para explicar la realidad. Ahí es donde entra la ficción», señala, y desde su última película se mete en sus recuerdos para enlazarla con 'El hombre esponja', la historia de un niño fascinado por su entrenador que está viviendo un drama personal con su novia y que se lo explica en forma de cuento. «Y los niños no lo entienden. Porque para los niños las cosas son buenas o son malas. Pero no pueden ser buenas y malas al mismo tiempo. Y eso vuelve a aparecer en 'Un monstruo viene a verme'... Es el mismo conflicto al que se enfrenta el niño. El entender la incertidumbre que supone estar vivo», resume.
El éxito de 'La sociedad de la nieve'
Es curioso escuchar a J. A. Bayona transitar con la mente lúcida por sus primeros proyectos -llega a recitar líneas de guion completas de aquellos cortos- mientras vive imbuido por la presión de estrenar 'La sociedad de la nieve', su último y más ambicioso proyecto, con el que volverá a representar a España en los Oscar. La película, que llega a los cines el 15 de diciembre y el 4 de enero a Netflix, no le ha dejado más que tres días «libres» desde el pasado mes de septiembre, cuando bloqueó una mañana en el hotel María Cristina de San Sebastián para charlar con ABC Cultural sobre la película y sobre cómo la literatura ha estado presente en su vida y en su filmografía. Una obra en la que, además de las letras, lo que jamás le ha abandonado nunca es el público. «Hay una cosa que sí que me he propuesto cuando he hecho películas, que es ser accesible. Lo que no entiendo es ese cine que se hace para un grupo reducido de personas o que hay que tener un catálogo al lado para entenderlo», remata.
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