La lucha de Colate por la custodia de su hijo con Paulina Rubio: «Mi hijo se fue llorando y destrozado»

Daniella Bejarano

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Iniciar sesión

11/11/2024 a las 10:19h.

Compartir

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Iniciar sesión

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete

La tensa relación entre Colate Vallejo-Nágera (52 años) y Paulina Rubio (53 años) sigue sumando capítulos de conflictos y desencuentros, esta vez con un nuevo frente de batalla abierto tras una reciente intervención del empresario en la revista 'Pronto'. Durante la entrevista, Colate evitó profundizar en el último altercado que protagonizó junto a la cantante en el aeropuerto de Madrid, donde, según testigos, un error de la mexicana con el pasaporte de su hijo desató un fuerte intercambio de palabras en presencia de los familiares del empresario y del propio menor. En lugar de centrarse en ese episodio, Colate ha decidido hablar abiertamente sobre el drama que vive ante la inminente partida de Andrea Nicolás hacia Miami, una medida que asegura no respeta el deseo de su hijo de quedarse en España.

Según relató Colate, la decisión judicial que obliga a Andrea Nicolás a volver con Paulina a Estados Unidos ha sido dolorosa para ambos. «Yo he cumplido con todo lo estipulado, pero la justicia ha determinado una ejecución forzosa para que nuestro hijo se vaya con Paulina. No se ha tenido en cuenta la decisión del menor, que quiere quedarse aquí«, expresó. Estas palabras reflejan la frustración del empresario, que sostiene que su hijo es feliz en España y desea permanecer rodeado de su familia paterna, un entorno que considera fundamental para su bienestar.

A pesar de los numerosos esfuerzos y de las grandes sumas invertidas en la batalla legal, Colate se enfrenta a la difícil realidad de que el niño deberá cruzar el Atlántico para vivir con su madre. Aun así, el empresario ha dejado claro que no piensa rendirse y que no contempla mudarse a Miami. «Tengo muchas responsabilidades profesionales en España que no puedo abandonar. Seguiré luchando en los tribunales para que se respete la decisión de mi hijo. Aquí es feliz con sus primos y el resto de la familia. Se fue llorando y destrozado«, declaró en tono contundente, aludiendo a la dolorosa despedida que vivieron ambos.

El conflicto entre los padres del menor se agudizó cuando, durante una de las entregas del niño en Segovia, la mexicana no pudo asistir en persona debido a un problema con su vuelo, lo cual desencadenó una escena de tensión entre Colate y los familiares de la artista. Según la revista 'Lecturas', el empresario recriminó a los allegados de la cantante que Paulina no se hubiese presentado, una situación que él mismo consideró como una falta de responsabilidad, especialmente por la importancia de dicho momento para el menor. Frente a este panorama, la situación sigue siendo un pulso constante, con ambos padres defendiendo sus posturas e incrementando el nivel de confrontación.

Sin embargo, la última estrategia de Paulina ha sido más que drástica. Preocupada por los efectos emocionales de esta batalla sobre el niño y por los supuestos intentos de Colate de influir negativamente en su relación con ella, la cantante habría solicitado al juzgado que el menor no pueda salir de Miami a partir de ahora. Así lo informó el periodista Álex Rodríguez en el programa '¡Siéntese quien pueda!', añadiendo que Paulina busca eliminar el tiempo de convivencia compartida que Andrea Nicolás pasa con su padre en España. Rodríguez también compartió un fragmento del documento presentado en los juzgados, donde la artista acusa a Colate de crear una «campaña tóxica» para que el niño se alinee en contra de ella, algo que ha generado preocupación en el entorno de la cantante.

Colate, por su parte, ha asegurado que no se quedará de brazos cruzados. El empresario promete llevar su lucha hasta las últimas instancias y seguir defendiendo lo que considera es el mejor interés de Andrea Nicolás. Según ha manifestado, no descansará hasta que se escuche la voz de su hijo y se respeten sus deseos. En su intervención en Pronto, dejó entrever que este conflicto no solo le afecta a él y a Paulina, sino también al propio menor, quien, según afirma, «lo está pasando muy mal».

Este conflicto, que ya lleva más de una década, parece estar lejos de resolverse. Para ambos, Andrea Nicolás es la prioridad, pero las diferencias entre lo que cada uno considera el «bienestar del menor» han dado lugar a una disputa que no muestra señales de disminuir. Colate, decidido a mantener su vida en España, sigue defendiendo su postura frente a la justicia, mientras Paulina, desde Miami, lucha por mantener el control sobre la vida y el entorno de su hijo. Una historia sin final a la vista y en la que, hasta ahora, la única constante ha sido la tensión que mantiene separados a estos dos padres.