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Madrí Madre: sándwich Tintín y el tapeo favorito de Martín Berasategui enfrente del templo de Debod

Esta taberna, cerca de Plaza de España, lleva la rúbrica del chef español con más estrellas Michelin y es un homenaje a la cocina que aprendió en casa

Martín Berasategui: «Soy un ejemplo de que ser buena persona es rentable»

Croquetas de jamón ibérico y de espinacas con ricotta, en Madrí Madre

Adrián Delgado

Madrid

16/06/2023
Actualizado 17/06/2023 a las 13:14h.

Hace unos meses, la noticia del regreso a Madrid de Martín Berasategui –el chef con más estrellas Michelin de España, con doce– llegó con réplica. El vasco se quedaba con la dirección gastronómica del Club Allard, el plena Plaza de España de la ... capital. Un reto para renacer este viejo conocido de la ciudad que llegó acompañado de una taberna popular a muy pocos pasos del espacio gastronómico: Madrí Madre.

En el esquinazo de Ferraz con Ventura Rodríguez, enfrente del Museo Cerralbo y del templo de Debod, está este bar concebido al estilo de las cervecerías clásicas que han ido menguando en Madrid. Una barra central, una rotonda en torno a la que fluye el ambiente, por la que corre la cerveza –bien tirada– y el vermú las mañanas del fin de semana. Aunque casi todo sucede en las mesas bajas dispuestas al lado de los grandes ventanales que tienen.

La carta rubricada por Berasategui apela a la memoria del Bodegón Alejandro en el que logró su primera estrella Michelin y a esos platos caseros que aprendió de su madre y sus tías. También hay una oda a la cultura del 'pintxo' de este donostiarra que se crio en plena parte vieja de San Sebastián.

Así aparecen clásicos como la gilda MB (3,5 euros, con un buen tamaño); el matrimonio de anchoa y boquerón en vinagre (7); las anchoas en salazón (seis, 16) y los boquerones en vinagre (seis, 8), por separado; o la sardina ahumada sobre pan de brioche (dos, 6 euros).

Imagen principal - Sobre estas líneas, las sardinas ahumadas sobre pan de brioche. Abajo, a la izquierda las mesas de Madrí Madre bordeando los ventanales de la taberna. A la derecha, el sándwich Tintín — Sobre estas líneas, las sardinas ahumadas sobre pan de brioche. Abajo, a la izquierda las mesas de Madrí Madre bordeando los ventanales de la taberna. A la derecha, el sándwich Tintín

Imagen secundaria 1 - Sobre estas líneas, las sardinas ahumadas sobre pan de brioche. Abajo, a la izquierda las mesas de Madrí Madre bordeando los ventanales de la taberna. A la derecha, el sándwich Tintín — Sobre estas líneas, las sardinas ahumadas sobre pan de brioche. Abajo, a la izquierda las mesas de Madrí Madre bordeando los ventanales de la taberna. A la derecha, el sándwich Tintín

Siguen otros, pensados para compartir, como las croquetas (cuatro, 9) de jamón ibérico o de espinacas y ricotta. Las bravas (9) en esta taberna llegan a la mesa con chistorra. Y la ensaladilla (14) –la carta permite marcar los favoritos y este es uno de ellos–, llega con ventresca y encurtidos.

Qué pedir: la sardina ahumada sobre pan de brioche, la gilda, la ensaladilla y los callos.
Perfecto para: una cena tras una tarde en el Museo Cerralbo.
Precio de la caña: 2,8 €.
Precio de la ensaladilla: 14 euros.
Dirección: Ferraz, 8.

Con «permiso» de su madre y de su tía, el chef ha metido en carta la receta de los callos (18) y de las albóndigas (12) del citado Bodegón Alejandro. El restaurante familiar en el que aprendió el chef. Para comer con las manos, un capricho entre panes: el sándwich Tintín (12), con crema de tocineta, queso de cabra y rúcula.

Quienes quieran terminar con un postre, tienen tres opciones: el arroz con leche, el flan MB y la cocotte de chocolate (8 cada uno). Cuidado con el recipiente en este último: llega a la mesa recién salido del horno.