Así robaban en una gasolinera de Burgos a los conductores más confiados

Aprovechaban el desatino de los conductores más confiados, que, por ejemplo, no apreciaron riesgo cuando tras echar gasolina fueron a pagar y dejaron el coche con las ventanas abiertas dados los escasos minutos que iban a estar alejados. Eran suficientes. Un grupo organizado al acecho había visto el hueco, se había acercado al vehículo y llevado sus cosas. Dos personas han sido detenidas en Burgos por al menos tres hurtos al descuido registrados por las cámaras de seguridad y la Guardia Civil llama a un mayor «recelo».

Los objetivos eran principalmente viajeros foráneos en tránsito por la AP-1 y la N-1 que detenían la marcha para descansar del viaje o repostar y mantenían «escasas o nulas» medidas de seguridad. Los arrestados tampoco eran de Burgos y supuestamente se desplazaban desde Álava para cometer los hurtos «a plena luz de día y con gran rapidez».

Una vez cometido el hurto huían en vehículo y se desprendían de bolsos, mochilas y carteras tras apropiarse de su contenido, normalmente dinero objetos de valor y tarjetas. De hecho, se les atribuye, además, un delito de estafa por repostar a débito carburante por más de 500 euros.

Su desmantelamiento llega después de una investigación que arrancó a raíz de un repunte de este tipo de delitos a lo largo de este segundo trimestre coincidente con el aumento de desplazamientos por carretera y las pesquisas llevaron a este «nuevo grupo organizado y coordinado».

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Estas bandas, explican desde Guardia civil, se caracterizan por la presencia de dos o tres personas y cada componente desempeña un determinado rol, normalmente actúan al descuido o entreteniendo a la víctima para que su cómplice actúe. En esta ocasión buscaban, normalmente, extranjeros en tránsito por las carreteras de Burgos.

Así, el Instituto Armado llama a los conductores a que cuando se detengan para descansar en áreas de servicio y/o descanso, mantengan el vehículo a la vista, suban las ventanillas, cierren con llave y no dejen bolsos, carteras ni objetos de valor a la vista. «Recele de aquellas personas que pretenden distraer su atención bajo sospechosos pretextos o despistarle», señalan.