Comodín de la militancia

Tudanca quiere pasar la bola a los militantes con una consulta difusa en la que todavía nadie sabe qué se votaría exactamente. Como reconocía el burgalés habría más opciones que en una pregunta de '¿Quién quiere ser millonario?'. Desde León cargos del PSOE plantean separar León de Castilla para juntarse a Asturias. Otros una autonomía con León, Salamanca y Zamora sin contar con Salamanca y Zamora. Y hasta se ha pedido un Bierzo solo sin León y sin Castilla. Es decir, les vale cualquier mapa que no incluya Valladolid. Hay muchos mapas para elegir a lo largo de la historia. El festival de ocurrencias es de tal despropósito que solo se explica en una urgente necesidad de atención para trabajarse pactos presentes y futuros. O en una estrategia orquestada para desgastar más rápido al cuestionado secretario general.

Intentaba Tudanca salir del atolladero diciendo que quizá es el momento de un reinicio del Estado Autonómico. No se me ocurre peor coyuntura, con la política nacional entregada al chantaje de las minorías nacionalistas, para confundir y frustrar un proceso con tan distinto origen y aspiraciones. Es al PSOE al que le urge un reinicio y en Castilla y León no deberían permitirse esperar a la reconstrucción tras el fin del sanchismo. En vez de una consulta apremia un congreso del que surja un liderazgo nítido que defina su proyecto político a una militancia y ciudadanía completamente desorientada. Y si este fragmento del PSOE encaja con el resto de los socialismos de España.