Crítica de arte
'Reversos': Los secretos del 'des-ilusionismo' en el Museo del Prado
Madrid
Una original, amena, respetuosa y oportuna relectura (sin caer en la iconoclastia), el ejercicio de la pinacoteca de darle la vuelta a sus cuadros es una idea magistral
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![Detalle de montaje de la muestra, con la aportación de Vik Muniz en el arranque](https://s1.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2023/11/07/SALAS_1-R0SQR3qAo5B74KPt3IG685K-1200x840@abc.jpg)
Sin la menor duda el Museo del Prado, la mejor pinacoteca del mundo, debería amanecer un día de estos con todos sus cuadros colgados del revés por múltiples razones en las que no entraré. Un arte como el de nuestra «razón cínica», que diría ... Hal Foster, «característico de una 'des-ilusión' radical», según Baudrillard, no puede desearle otra cosa a la ilusión gombrichiana –y por supuesto nos recibe aquí la obra famosa de Vik Muniz 'Las Meninas vueltas del revés'– y, además, lo único que les queda ya por hacer a los artistas es una huelga indefinida: ¡Ni una imagen más!
Y de paso, a los turistas. Y a los de Just Stop Oil.Miguel Ángel Blanco, en cualquier caso, ha ideado una original, amena, respetuosa y oportuna relectura (sin caer, él, en la iconoclastia), a caballo entre lo científico y lo artístico –el capítulo 'Ornamentos y fantasmas', por ejemplo, roza lo delirante: aunque verme a mí mismo contemplando los restos de cinco travesaños del bastidor original del 'Guernica' tampoco está mal–, de las colecciones del museo, investigando durante años en sus archivos para encontrar aquellos reversos que pudieran resultar más interesantes y trayendo, además, obras singulares de otros veintinueve museos y colecciones para apuntalar su relato.
El cuadro dentro del cuadro
El cual parte, de nuevo, de 'Las Meninas', en la que la quinta parte del cuadro aparece ocupada, precisamente, por ese reverso que representó Vik Muniz. De tal suerte que de la representación barroca del 'cuadro dentro del cuadro' –del tema del artista tras el lienzo al trampantojo; luego no faltará Magritte: Esto no es una trasera– llegaremos al concepto contemporáneo de 'cuadro objeto' –donde podría figurar la 'Jarra y violín' (1909) de Braque, con su famoso clavo proyectando su sombra sobre la pintura: la ilusión matando la ilusión–, con obras importantes de Fontana, Tàpies o Miró.
No obstante, buena parte de este paseo libre y maravilloso –estancias pintadas de negro, luces puntuales, cuadros que flotan en vitrinas, ciento cinco obras que no se agrupan por épocas sino por temas, siendo la más antigua un temple sobre tabla de Fran Angelico (1395-1455) y las más recientes las del propio Miguel Ángel Blanco, unos 'libros-caja' de su conocida 'Biblioteca del Bosque', donde ha guardado el polvo y otros residuos acumulados en el reverso de cuadros del Prado– posee una dimensión más científica y didáctica, casi arqueológica: después de todo, se trata para el espectador de acceder a un mundo oculto, subterráneo (muchas de estas obras del Prado no se habían expuesto nunca), sólo al alcance de restauradores, conservadores e investigadores.
![Imagen principal - Arriba, disposición en sala de ‘Monja arrodillada’, de Martin van Meytens. Sobre estas líneas, un hombre fotografía algunas traseras expuestas. A la derecha, detalle de los bastidores de ‘El Guernica’](https://s2.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2023/11/07/1473759700-U53586708630prp-758x470@abc.jpg)
![Imagen secundaria 1 - Arriba, disposición en sala de ‘Monja arrodillada’, de Martin van Meytens. Sobre estas líneas, un hombre fotografía algunas traseras expuestas. A la derecha, detalle de los bastidores de ‘El Guernica’](https://s2.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2023/11/07/1473766405-U55858101886ZVa-464x329@abc.jpg)
![Imagen secundaria 2 - Arriba, disposición en sala de ‘Monja arrodillada’, de Martin van Meytens. Sobre estas líneas, un hombre fotografía algunas traseras expuestas. A la derecha, detalle de los bastidores de ‘El Guernica’](https://s1.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2023/11/07/1473759857-U51644182882OTL-278x329@abc.jpg)
Hay varios capítulos dedicados a este asunto: 'Más información al reverso', donde se muestran anotaciones hechas por los artistas o sellos y documentos que informan de los viajes de los cuadros o de la identidad de sus sucesivos propietarios; 'Naturaleza de fondo', donde se reúnen obras realizadas sobre soportes poco convencionales, como el cobre, la pizarra, el alabastro, la porcelana, el marfil o el corcho.
En 'El lado oculto' se muestra sobre todo pinturas que los artistas desecharon, empleando la parte posterior del lienzo para realizar otras distintas –destaca aquí la figura de Ernst Kirchner, quien habría pintado 135 reversos–; 'Pliegues, cortes y recortes' da testimonio de las transformaciones y adaptaciones de obras originales y donde se incluye algo inopinadamente un palazuelo por aquello de los plegados, o 'Caras B', el capítulo central, donde se muestran pinturas de doble cara –esencialmente temas religiosos donde se establece una relación alegórica entre la escena principal y la del reverso– y donde está una de las piezas más llamativas de la exposición (observo que los medios se han apresurado a escogerla para ilustrar sus crónicas): una pintura picante de Martin van Meytens, 'Monja arrodillada' (1731), donde la joven religiosa aparece de frente orando pero, en la parte posterior, vemos sus orondas nalgas desnudas.
Visiones subjetivas
No obstante, Miguel Ángel Blanco, como buen artista, ha querido dar visiones más subjetivas: se trata, también, de que el arte contemporáneo transforme nuestra percepción de los clásicos.
En 'El bastidor como cruz' sugiere que «la tela se sujeta con clavos al bastidor, se crucifica, y para transportar los cuadros los agarramos por él, portamos la cruz». Aquí se incluyen los fragmentos del del 'Guernica', «quizá el más castigado de la Historia» y fotografías de Rothko o Georgia O'Keeffe dolientes.
En 'De espaldas', frente a la pintura, es el espectador el que exhibe su propio reverso –hay una divertida foto de Elliott Erwitt, 'Madrid, Museo del Prado' (1995), donde un nutrido grupo de hombres contempla la 'Maja desnuda' y una solitaria mujer, la 'Vestida', y un díptico de Sophie Calle donde aparece una figura mirando el espacio vacío dejado por un Rembrandt robado y, junto a la imagen, su descripción subjetiva de la obra.
Y en 'Ornamentos y fantasmas', podremos ver telas especiales, como el 'mantelillo veneciano' usado por Eugenio Cajés, o la 'tela de colchón' sobre la que pintó José Mª Estrada, pero, sobre todo, los 'fantasmas' que aparecen al empaparse de aceites, pigmentos y barnices, como en las obras de Vivente Palmaroli y Orazio Borgianni.
!['Reversos'](https://s3.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2023/11/07/ARTISTA_ESTUDIO_estudio_Rembrandt-U46316640722SOE-366x206@abc.jpg)
'Reversos'
Colectiva. Museo del Prado. Madrid. Paseo del Prado, s/n. Comisario: Miguel Ángel Blanco. Patrocinio: Fundación AXA. Hasta el 3 de marzo
Esta última 'fantasmagoría' ha sido escogida para la portada del catálogo; exquisito, como todo lo que edita el Prado, con ensayos de Victor I. Stoichita, Ramón Andrés, Ana González Mozo, Antonio Muñoz Molina y texto del comisario.
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