Crítica El sistema solar: Crónica familiar
«Una familia se reúne en casa por Navidad y ya vemos que, en Perú como aquí, lejos de parecerse al anuncio de café malo, la ocasión sirve para sacar lo peor del ser humano»

Esta producción hispano-peruana adapta una función teatral que encuentro antigua, aunque ignoro si el modelo sigue vigente: es ese tipo de obra que añade a la concentración espacial de la escena una condensación temporal y dramática que hace que todo sean revelaciones y acusaciones, puntos de giro y picos de clímax. Es una de las cosas en las que más se nota la diferencia entre «teatro» y «cine», este último hace más de medio siglo que viene vaciando su dramaturgia… hasta irse al otro extremo. Pero como digo en «El sistema solar» no hay problemas de minimalismo.
Una familia se reúne en casa por Navidad y ya vemos que, en Perú como aquí, lejos de parecerse al anuncio de café malo, la ocasión sirve para sacar lo peor del ser humano. Uno está amargado, aquella está embarazada, otro tiene tal enfermedad (terminal, por supuesto), este habla con animales aunque sean los domésticos… El tono es realista, porque son asuntos serios, así que no hay lugar para la ironía o el exceso, que podrían servir de agarradera al espectador, salvo en el caso de Gisela Ponce de León, que está muy intensa y además canta muy bien.
La razón de que se estrene, supongo, es la presencia de Adriana Ugarte que como guest star tiene un papel no menor pero mayormente de observadora.
Noticias relacionadas
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete