La celebración de anoche en Bilbao de los portavoces de Bildu y sus miles de simpatizantes tras conocerse que tenían vía libre a las urnas el 22 de mayo bien se asemejó a las algaradas populares fruto de los triunfos de España en el Mundial y la Eurocopa. O a la última exhibición patriótica de los estadounidenses saliendo en tromba a festejar la muerte del enemigo Osama Bin Laden. Ayer la militancia de Bildu, que nunca disfrutó con los éxitos de “La Roja”, celebró su rehabilitación para la vida política con gritos de “independencia” y la exigencia de “amnistía” para los presos de ETA.
“Está siendo un parto muy doloroso”, confesó a este diario José María Gorroño, alcalde de Guernica por EA y candidato a la reelección por Bildu. “¿No tienen sueño o qué?”, se desesperaba un simpatizante poco antes de la medianoche, pese a que los “bertsolaris”, “irrintzis” y los cánticos populares animaban la velada. Al final, pasados veinte minutos del límite establecido, los portavoces de Bildu recibían la confirmación oficial. “¡Por fin! ¡Lo hemos logrado!”, se abrazaban entre ellos, algunos con lágrimas en los ojos. “¡Voy a leer el discurso de la legalización, que es más emotivo!”, bromeó un portavoz de la coalición.
Puño en alto, Pello Urizar (EA) , Óskar Matute (Alternatiba) y el “independiente” columnista de Gara Martín Garitano se dirigieron a su militancia, que esperó reunida en la calle desde las 8 de la tarde, al grito de “Gora Euskal Herria libre y socialista”.
«El triunfo de la libertad»
“Hemos luchado contra quienes nos querían doblegar. Es el triunfo de la libertad. Un triunfo colectivo que nadie nos podrá arrebatar jamás, al igual que nuestra dignidad. Vamos a llenar el 22-M las urnas de votos abertzales y de izquierdas”, proclamó Matute tras afirmar que la “ola de solidaridad” formada por la coalición de fuerzas independentistas “es imparable”. “Apostamos por la restitución de todos los derechos humanos, civiles y políticos de todas las personas en Euskal Herria”, añadió, sin ocultar que el objetivo es la “construcción nacional” de un Estado vasco independiente. Finalmente, tras cuatro horas y media de espera, las bases de Bildu culminaron su acto de apertura de campaña entonando un “Eusko Gudariak” mientras los cláxones de los coches sonaban en la noche.