El alcalde de Sevilla pide que el dinero que se ahorra el Ministerio con el puente de la SE-40 se reinvierta en el metro

El alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, ha exigido al Ministerio de Transportes que el dinero que se va a ahorrar con la construcción del puente de las SE-40 sobre el río en lugar de los túneles se reinvierta en Sevilla mediante un plan de inversiones en infraestructuras. El regidor hispalense, que adoptó hace unos días una postura reivindicativa frente al Gobierno de Sánchez, ha vuelto a insistir en que la gestión de los distintos ejecutivos centrales, ya sean del PP o del PSOE, ha sido «desastrosa» en este asunto.

Por ello, en un tuit le ha pedido que resuelva ya los plazos, los presupuestos y aporte compromisos reales para el cierre completo de la circunvalación. «Si la opción para la SE-40 es el puente, exijo que la diferencia económica se reinvierta en Sevilla con un plan de inversiones en infraestructuras para la cuarta ciudad de España, con un área metropolitana de 1,5 millones de personas: carreteras, conexiones ferroviarias -entre ellas la de Santa Justa con el aeropuerto-, metro...», ha señalado.

En este sentido, ha dejado claro que defenderá los intereses de Sevilla y que el Ministerio de Transportes «tiene que explicar a instituciones, agentes sociales y económicos y ciudadanía por qué el cambio de posición y los motivos por los que se considera el puente la mejor opción técnica para cerrar el anillo de la SE-40».

Por otro lado, en el alcalde ha aprovechado una intervención en el Pleno municipal de este jueves para explicar la postura de su gobierno al respecto del túnel: «Después de 30 años es injustificado el retraso que lleva la SE-40 en Sevilla. Le he trasladado al ministerio que es imprescindible cerrar el anillo. ¿El anillo pa’ cuándo?, le he dicho, reclamando que debe haber en los presupuestos de 2023 las partidas correspondientes».

Por último, el regidor ha señalado que «si seguimos con este estrangulamiento perderemos relevancia a nivel nacional e internacional y seguiremos siendo una ciudad de segunda»