«La mayoría de las entrevistas de trabajo las hará de aquí a poco una Inteligencia Artificial entrenada con determinados sesgos»

-Ha publicado un libro sobre las aplicaciones de chatGPT a los recursos humanos. ¿Las entrevistas de trabajo las acabará haciendo una IA?

-Sí. De hecho, el 80 por ciento de la metodología de una entrevista de trabajo está completamente estandarizado «(¿donde te ves dentro de tres años?; »¿de qué reto o logro te sientes orgulloso?«) y la suele hacer personal junior en muchas empresas. El senior entra después para tomar la decisión final entre muy pocos candidatos.

-¿No son peligrosos los sesgos de la IA?

-La IA tiene sesgos, como todos nosotros. Depende de cómo la entrenemos pero hay también mucha mitología en esto. Los sesgos radicales como hombre/mujer, o blanco/negro, están prácticamente desterrados de la IA, pero sí hay sesgos más sutiles que responden a la cultura o lengua del usuario. En mi opinión, algunos de estos sesgos son necesarios desde un piunto de vista cultural.

-La medicina es uno de los campos donde la IA se está aplicando más. ¿Va a ser una revolución a todos los niveles?

-En EE.UU. una IA se presentó al examen habilitante que han de hacer los médicos allí cuando acaban sus estudios y quedó de los primeros entre muchos miles de ellos. La IA va a ser uno de los mejores doctores que tengamos y una de las mejores herramientas de diagnóstico de los médicos.Muchos están entrenando su IA con sus propias radiografías, especialmente en temas dentales y dermatológicos. En el momento en que tengas la información, no hay interpretación, lo podría hacer hasta un junior.

-Un diagnóstico precoz es básico en salud.

-China ha lanzado su primer hospital de IA, con nueve mil diagnósticos al día, y lo ha lanzado inicialmente para estudiantes que salen de la carrera pero el año que viene servirá ya de ayuda a doctores especialistas. La IA es muy buena relacionando datos y haciendo patrones. Como hace Netflix con las recomendaciones de películas.

-Dice el dermatólogo Julián Conejo Mir que de aquí a tres o cuatro años lo primero que verá cualquier paciente en el Virgen del Rocío no será una persona sino una IA, que le hará ese primer triaje.

-Esto da un poco de miedo al principio pero conociendo el sistema de IA hay que tranquilizarse porque no se va a equivocar. Su fiabilidad es altísima.

-Y su rapidez. ¿Podría reducir las listas de espera del sistema sanitario?

-Sí, sin duda. Tanto en la sanidad pública como en la privada. Y puede suponer la salvación del sistema sanitario ante su creciente masificación, siempre que se entrene bien y se aplique bien.

-Los hospitales pudieron atender a los pacientes crónicos durante la primera ola de la pandemia gracias a la telemedicina, ya implantada en especialidades como la dermatología, pero que era inexistente en la mayoría.

-Se tuvieron que poner las pilas muy rápido y lo hicieron muy bien, en general. Y también evitaron los riesgos de infecciones hospitalarias, además de los desplazamientos innecesarios. La IA ayudó mucho en las vacunas del Covid de ARN mensajero y uno de los Nobel de Medicina de este año ha descubierto, gracias a su IA, la secuencia de las proteínas, con la que se espera que pueda ayudar a aumentar la esperanza de vida bastantes años.

-Eso serán más pacientes en los hospitales con más enfermedades.

-Sí, y tengo muchas esperanzas de que la IA y la tecnología nos ayudará mucho a salvar el sistema y dar respuesta a esa demanda creciente. En enero de este año la IA descubrió en un plazo de 80 horas un elemento hasta ahora inexistente en la naturaleza mezclando 80.000 compuestos. Y ese material reduce el litio que necesitan las baterías eléctricas hasta en un 70/80 por ciento. El litio es un componente básico en todos los dispositivos electrónicos y, además, es muy contaminante. Es un descubrimiento de gran impacto.