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Alejandro Vergara y Paula Losada, en el episodio 211 de 'La Promesa' RTVE
Óscar Rus

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Se acabó la agonía en 'La Promesa', el serial de La 1 de TVE. Jimena (Paula Losada), la que fuera prometida del primogénito de los marqueses de Luján (asesinado en el primer episodio) y ahora mujer del hermano de este, Manuel (Arturo Sancho), ha 'perdido' al bebé que estaba esperando; una tretra por parte de la hija de los Duques de los Infantes –que se inventó estar embarazada para asegurar su porvenir– en la que ha tenido un cómplice: Abel (Alejandro Vergara), el médico que llegó a La Promesa por recomendación de su amigo Manuel y bajo la desaprobación de Cruz (Eva Martín).

El 'teatrillo' por parte de Abel y Jimena, aliados inesperados, empezó cuando mientras ella se levantaba, la doncella Teresa (Andrea del Río) de La Promesa encontraba una mancha de sangre en las sábanas. Tras el revuelo inicial, Abel pedía quedarse a solas con Jimena en la habitación y mientras los familiares y los trabajadores se preguntaban qué estaba pasando, Abel y Jimena hablaban de su plan maestro. «Una hemorragia de esa índole no admite ninguna duda», le trasladaba el médico. Pero había que mantener la farsa un poco más, pues Abel debía retirar del vientre de Jimena los restos de su supuesto embarazo (algo que todavía no ha pasado en pantalla): «Será todo mentira. Un teatrillo para mantener la farsa». Para ella, fingir no suponía ningún problema después de todo lo sucedido.

Las declaraciones de Abel que lo cambian todo

Dicho y hecho. Abel trasladó minutos después a la familia política de Jimena que esta había perdido el embarazo. La propia Jana (en pleno romance con Abel tras la imposibilidad de tener algo con Manuel, casado con Jimena) le avisó al hijo de los marqueses de Luján que había mucha sangre y que eso no era buena señal. Y llegó el momento de que Abel comunicase la mala noticia: «Jimena ha perdido el bebé. He estado examinando los restos y venía con malformaciones. El tamaño del feto no correspondía con el bebé de cinco meses».

Parecía que todo había salido a pedir de boca, pero Manuel quería ver al bebé. «Le pedí a Abel que se deshiciera de él», volvió a mentir Jimena. Manuel quería dar sepultura a su hijo; sin embargo, su mujer se las ingenió para convencerle de no hacerlo y así no volver a pasar por ese «momento doloroso».

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