El dispositivo que se instala de forma fácil en el retrovisor del coche y sirve para evitar accidentes

David Sánchez de Castro

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08/02/2024
Actualizado 15/02/2024 a las 20:12h.

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Conducir por carretera, especialmente si es de montaña o en zonas rurales, obliga a tener un especial cuidado. Los animales salvajes son 'usuarios' de las calzadas no invitados que muchas veces provocan accidentes, algunos de ellos muy serios, por lo que además de la obligada precaución al volante, hay ayudas que pueden venir muy bien.

Es por ello que es altamente recomendable tener en cuenta adquirir un pequeño dispositivo emisor de ultrasonidos, que se puede encontrar en tiendas online de manera fácil y barata, y cuya instalación apenas necesita 5 minutos.

No es la primera vez que un ciervo, un corzo, una liebre o un jabalí salta de una mediana o de un campo adyacente a la carretera y el conductor que pasa le embiste sin remedio. Si hubiera podido emitir un sonido estridente para hacerles correr, se hubieran evitado estos golpes que, en muchos casos, resultan fatales.

Estos ahuyentadores hacen exactamente lo que su nombre dice: emiten unos sonidos audibles solo para los animales preparados para captar frecuencias muy altas, que para ellos resultan molestas, y les hace huir. Si huyen, se evitan los accidentes.

Hay diferentes tipos. Los hay que simplemente cuentan con orificios muy pequeños que dejan pasar el aire produciendo un silbido que produce el efecto deseado. Otros, en cambio, emiten sonidos como tales, que se pueden activar desde otros dispositivos por vía 'bluetooth' o similar, y que cuentan con más tecnología. Estos, evidentemente, son mucho más caros.

Los primeros apenas pasan de los 5 o 6 euros en las principales tiendas de compra online. La manera de instalarlo no puede ser más sencilla, ya que cuentan con una base con un adhesivo que se pega en la parte más lisa del retrovisor (preferiblemente debajo para que el viento no se lo lleve) o en una aleta delantera del coche. También es recomendable añadir una cinta de adhesivo de doble cara para reforzar que quede bien fijado a la carrocería del coche.

Se ponga donde se ponga, hay que estar especialmente acertados en su orientación, ya que es necesario que pase el aire de manera óptima para que funcionen.

Una vez colocados, su mantenimiento no es más que la limpieza normal y, en caso de que se rompan, reemplazarlos. Al precio que están, no supone una gran inversión para el beneficio potencial que permiten.