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Decoración
La Navidad está llena de costumbres y tradiciones y muchas de ellas, nos permiten decorar el hogar de forma alegre. Uno de los adornos que no falta cada Nochebuena es la Corona de Navidad en las puertas de la casa, como símbolo de la esperanza.

Sin duda, la decoración de la mesa es lo que más atenciones requiere debido a que, tanto la cena de Nochebuena como la de Fin de Año, serán recordadas por sus familiares e invitados en cada reunión. No se preocupe, para ello no necesita realizar una gran inversión, simplemente se trata de combinar los objetos adecuados para que los platos, además de ser apetitosos, luzcan deliciosos.

Durante las fiestas decembrinas la decoración de las mesas es un poco recargada en comparación con cualquier otra cena especial. La luz y el color son los principales protagonistas. Un candelabro o dos, según el tamaño de la mesa, le darán el toque de luz y elegancia necesaria. Si no le gustan las velas puede usar lámparas bajas o luces tenues que no incidan directamente sobre la mesa.

Si desea situar un detalle floral en el centro de la mesa debe evitar que por su tamaño se convierta en una barrera entre los invitados. Es recomendable que el aroma de las flores no sea muy fuerte para que no interfiera al degustar la comida. Para que las flores luzcan frescas durante la celebración puede mantenerlas en la nevera hasta la hora de poner la mesa. Las flores artificiales no son la mejor elección. Un detalle muy actual es incluir una vela fina y alargada en el arreglo floral. Recuerde que las velas y las flores son adornos para decorar la mesa, no obstáculos para sus conversaciones.

Lo más indicado para una cena tipo bufé lo más indicado es un candelabro de piedra con velas pequeñas; pero si no desea preocuparse por la duración de las velas puede colocar una amplia copa de cristal con candelas flotando en gelatina.

El centro de mesa del comedor y del salón pueden ser iguales, siempre y cuando el segundo sea de menor tamaño.

La mesa lucirá muy bien con un mantel blanco de encaje. Si le gusta que la mesa no tenga adornos, un mantel relativo a esas fiestas, con servilletas de colores lisos, rojo o verde, le darán un toque alegre. Trate de evitar el color azul porque este tono inhibe el apetito y compruebe que el mantel concuerde con las medidas de la mesa.

Las copas de cristal con detalles dorados que hagan juego con la vajilla de fiesta de bajoplatos dorados y plateados se verán muy bien acompañadas por un servilletero de cuentas. Los cubiertos de plata son los más adecuados. Sin embargo, la cubertería de nácar o con mangos de colores también le permitirán quedar bien. Si el juego de copas que tiene actualmente es de pie plateado o de cristal de colores no se desanime estas combinan muy bien con los candelabros de metal o de cristal, en este caso es mejor que la vajilla tenga detalles en plata.

Colocar una hilera de pequeños porta velas en forma de cubo en la chimenea o en alguna repisa cercana al comedor hará más cálido el ambiente navideño. Las estrellas, bolitas o rectángulos de cera en pequeños candelabros le pueden dar vida a esa pequeña mesa del rincón en la que puede colocar las bebidas o los implementos que necesitará para servir la cena.

No olvide que para decorar la mesa lo importante es la imaginación y un estilo que se adapte al gusto y edad de los invitados. La mesa de los más chicos no tiene por que lucir igual que la de los "adultos", a los primeros les encantan los vasos, bandejas y servilletas con motivos navideños. Las velas no son lo más recomendable para la mesa de los niños. Si es posible ubique la mesa de los más pequeños cerca del árbol de Navidad.