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Sarah Ferguson, diagnosticada de cáncer de piel seis meses después de ser tratada de uno de mama

La exmujer del Príncipe Andrés sufre un melanoma maligno, detectado tras extirparle varios lunares

Aumenta la preocupación por el estado de salud de Kate Middleton: «Algo ha salido mal»

El duro revés de Sarah Ferguson que afecta al príncipe Andrés en su peor momento

Sarah Ferguson, duquesa de York AFP
David Sánchez de Castro

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Sarah Ferguson, duquesa de York y exmujer del Príncipe Andrés, sufre un melanoma maligno, una forma muy agresiva de cáncer de piel.

Es la segunda vez que Ferguson, de 64 años, recibe una noticia tan complicada para su salud: hace apenas medio año tuvo que ser intervenida de un cáncer de mama. Pese a estos golpes, según un portavoz, se encuentra con «buen ánimo».

Según un portavoz, fue su dermatólogo el que pidió que le quitaran y analizaran los lunares durante una cirugía reconstructiva después de su mastectomía, ya que sospechaba de su forma y color. Uno de ellos fue el que resultó canceroso.

«Ella está siendo sometida a más pruebas para garantizar que esto se haya detectado en las primeras etapas. Claramente, otro diagnóstico tan pronto después del tratamiento del cáncer de mama ha sido angustioso, pero la duquesa sigue de buen humor», ha explicado.

Además, han aprovechado esta noticia para poner el foco en la prevención y en tomar conciencia sobre «importancia de comprobar el tamaño, la forma, el color y la textura y la aparición de nuevos lunares que pueden ser un signo de melanoma». La duquesa de York se ha tratado en el Hospital King Edward VII de Londres.

La noticia ha supuesto todo un 'shock' en la sociedad británica, que ha visto cómo sus queridos 'royals' son noticia en estos días debido a sus problemas de salud.

La mala racha de salud de los 'royal' británicos

Esta es la tercera persona de la familia real británica (aunque, en el caso de Ferguson, sea ex) que sufre un contratiempo de salud en apenas unos días. El Rey Carlos III fue intervenido por un agrandamiento anormal de la próstata, una hiperplasia benigna, mientras que Catalina, la Princesa de Gales, se sometió a una cirugía abdominal.

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