Hazte premium Hazte premium

Las memorias póstumas de Lisa Marie Presley revelan que Michael Jackson era virgen a los 35 años

La intimidad sexual del cantante o su adicción a las pastillas son algunos puntos destacables de las confesiones de la hija de Elvis Presley

El escándalo sigue con Lisa Marie Presley: cómo conservó el cuerpo de su hijo Benjamin en su casa dos meses después de su muerte

Lisa Maríe Presley y Michael JAckson gtres

Esta funcionalidad es sólo para registrados

El pasado martes 8 de octubre salieron a la luz las memorias póstumas de Lisa Marie Presley, única hija de Elvis Presley y su mujer, Priscilla. La cantante, que falleció en enero de 2023 con solo 54 años de edad a causa de una obstrucción intestinal, dejó desolada a su familia; más aún a sus tres hijas, Riley Keough, Harper y Finley Lockwood.

En las memorias de Lisa Marie se relata como conoció a Michael Jackson y cómo fueron esos tiempos que pasaron juntos desde que se conocieron, allá por 1994, hasta su divorcio en 1996. La cantante y actriz aún estaba casada con su primer marido, Danny Keough, antes de comenzar a salir con el artista, pero eso no impidió que Jackson se empeñase en conseguir una cita con ella. Se separó de su marido poco después para comenzar una relación con Michael Jackson que define como «un amor puro». Tan puro que, como ella misma confiesa en sus memorias, «me dijo que todavía era virgen» a sus 35 años.

«Creo que había besado a Tatum O'Neal y que había tenido una relación con Brooke Shields, que no había sido física, aparte de un beso. Dijo que Madonna también había intentado acostarse con él una vez, pero que no pasó nada. Yo estaba aterrorizada porque no quería dar el paso equivocado», agrega. Se separaron por «diferencias irreconciliables» y después pasó lo que pasó con Michael Jackson.

80 pastillas al día

Lisa Marie Presley tenía 9 años cuando fue testigo de la muerte repentina de su padre, Elvis Presley, el 16 de agosto de 1977 a los 42 años por un paro cardíaco en Graceland. En una emotiva entrevista con Oprah Winfrey, Riley Keough ha contado cómo vivió su madre aquello. «Se despertó esa mañana y sintió que algo no estaba bien. Sabía instintivamente que algo andaba mal. La noche antes le dijo buenas noches y tuvo una sensación en ese momento, como si tuviera algún tipo de presentimiento sobre su muerte».

La hija de Elvis tuvo en realidad una existencia desdichada tal y como refleja el libro. Baste un detalle: llegó a consumir hasta 80 pastillas al día en plena adicción a los opioides. «Fue una evolución que simplemente se agravó. Tomaba cada vez más para poder estar drogada y realmente no sé cuándo el cuerpo decide que ya no puede más, pero lo hace en algún momento», se describe. Una frase lo resume todo: «Era demasiado doloroso estar sobria».

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación