José Fernando, entre las cuerdas: investigado por un delito de estafa que podría acabar en cárcel

«José Fernando está luchando muy bien y estoy muy contento por él. Es un orgullo verle recuperado. Yo creo que ha sido su madre, Rocío, que lo ha ayudado desde donde esté. Nos está ayudando a todos», confesó José Ortega Cano en unas declaraciones recientes. Sin embargo, esa paz de la que gozaban, de algún modo, en la familia ha llegado a su fin. Según la revista 'Semana', el hermano de Gloria Camila, que salió del centro en el que permanecía ingresado hace unos meses, ha tenido que ir al Juzgado número 3 de Madrid para «declarar en calidad de querellado por un delito de estafa».

Todo esto ocurrió hace unas semanas y hasta allí se desplazó con su representante legal y con su hermana, quien siempre está junto a él brindándole su apoyo y cariño. En esta ocasión más ya que desde la cabecera aseguran que «José Fernando se encontraba muy nervioso por esta cita judicial y la mano amiga de su hermana le sirvió de gran apoyo». Y es que, el joven y su primo, administradores de la empresa Medelauto Express S.L, han sido acusados de «cometer una presunta estafa por una empresa dedicada a realizar préstamos utilizando coches como avales, tras la venta de 13 vehículos». Señalar que la empresa de la que son administradores se dedica a la reparación de vehículos.

También apuntan que el hecho de que sea una querella «implica que va por la vía penal y, por ende, podría conllevar pena de cárcel». Una situación que inquieta, y mucho, a sus familiares. Recordar que José Fernando fue condenado a un año y nueve meses de prisión por dar una paliza y sustraer un coche a un joven en 2013. Y entró en la cárcel. Sin embargo, su familia logró que a los cuatro meses saliera para ingresar en un centro de desintoxicación en Barcelona. Pero este no ha sido el único quebradero de cabeza del joven con lo que respecta a la Justicia española.

En 2016, se le impuso una orden de alejamiento que había pedido María Rodríguez, más conocida como Michu. Él decidió hacer caso omiso y se la saltó en varias ocasiones. Una de ellas cuando la joven permanecía ingresada, un tiempo antes de que naciera su primogénita. Un año después, hizo frente a una arresto después de atentar contra un agente de la autoridad. Así, por su currículum, se determinó su ingreso en prisión. Aunque cuando llegó ese momento, el hermano de Rocío Carrasco estaba rehabilitándose en el centro psiquiátrico de San Juan de Dios de Ciempozuelos, en Madrid, de donde salió hace unos meses.