Gérard Depardieu: «A las mujeres les encanta montar a caballo. Sus clítoris rozan la silla. Son unas zorras»

La carrera pública del actor francés Gérard Depardieu (74 años) se ha destruido al enfrentarse a cuatro procesos judiciales tras una veintena de acusaciones de violación, agresiones y violencias sexuales y un rosario de escándalos políticos, haciendo la apología de tiranos y dictadores.

Tres años después, las revelaciones y acusaciones han crecido de manera espectacular. La última denuncia, la de Hélène Darras, en curso de investigación judicial, ha acelerado la difusión de documentos, grabaciones y denuncias, siempre más graves, sucias, groseras y peligrosas. La cadena de televisión 'France 2' emitió la semana pasada un vídeo realizado durante una visita de Depardieu a la capital de Corea del Norte en el que el actor aparece tocándole el culo a una joven mientras gritaba: «¡Mirad, mirad cómo lo tiene!». Además de ciertos comentarios sobre las partes íntimas de las mujeres, comentados entre risotadas y en un tono grosero y obsceno.

Ahora se ha filtrado un nuevo vídeo en el que el actor visita un centro de equitación durante su visita a Corea del Norte en 2018 y dice: «A las mujeres les encanta montar a caballo. Sus clítoris rozan la silla (...) Disfrutan mucho. Son unas zorras».

Por su parte, la familia de Gerard Depardieu defiende al actorasegurando que el artista está siendo sometido a una «conspiración sin precedentes» y es víctima de una «monstruosa manipulación»: «Nuestro padre/abuelo/tío está siendo sometido a una conspiración sin precedentes. Es víctima de una monstruosa manipulación llevada a cabo por un periodista que no dudó en hurgar en la basura», han criticado en una columna publicada en 'Le Journal du Dimanche'.

El texto está firmado por Julie, Roxane, Jean (sus hijos), Delphine (su sobrina), Élisabeth (su ex esposa) «y toda la familia Depardieu». «¡En privado, con sus hijos, es alguien sumamente modesto, delicado y hasta mojigato!», han asegurado, afirmando que a Depardieu le gusta «jugar a la provocación» cuando está delante de una cámara.

Sobre el vídeo que ha salido a la luz, la familia reconoce que estaban «conmocionados» por sus palabras y añaden que «a menudo» les sorprenden los testimonios que el actor realiza. Sin embargo, lamentan que el documental haya optado por reducir al actor al papel de «idiota», que es el que menos les gusta: «Grosero, descarado, pesado a veces, ¡pero no violento!», asevera la familia, que critica que «sus excesos» y su «libertad de palabra» era lo que gustaba sobre Depardieu. «Esa figura se alentaba para hacer reír a mucha gente en el cine y en los platós», precisan.

Por último, la familia Depardieu recuerda que el actor pidió disculpas en una carta publicada en 'Le Figaro' e indican que «hacer daño no es su intención» y piden «detener la confusión entre palabras y acciones» y «no utilizar provocaciones verbales para sustentar otras acusaciones», que según ellos son «muy deshonestas».