Robles sopesa sacar de Madrid el desfile del Día de la Fiesta Nacional
Los gastos de la parada militar se duplicarían, hasta sobrepasar los dos millones de euros
Fuentes militares destacan que la logística de los actos se complica mucho fuera de la capital de España
Desfile del Día de la Fiesta Nacional el 12 de octubre del año pasado celebrado en Madrid
La ministra de Defensa, Margarita Robles, sopesa llevar fuera de Madrid el desfile del Día de la Fiesta Nacional, que se celebra el 12 de octubre. De hecho, según ha podido saber ABC, ha encargado a sus colaboradores los estudios preliminares para ello, ... dado que una decisión como esa conlleva problemas logísticos mucho más complejos que los que plantea una parada militar como las que se hacen en Madrid de forma habitual con ese motivo.
Fuentes militares consultadas por ABC señalan que una decisión como esta supone, entre otras cosas, duplicar el presupuesto para el desfile, al pasar del millón de euros que costaba hasta ahora hacerlo en Madrid a superar los dos millones, ya que habría que pagar muchos desplazamientos, con el coste añadido del combustible, buscar alojamiento adecuado y pagar las dietas correspondientes.
«Ese sobreprecio se debe a que esta parada militar es mucho mayor que la que se hace con motivo del Día de las Fuerzas Armadas, que sí es itinerante»
Fuentes militares consultadas por ABC
Para esas fuentes, el dato económico, en un momento de crisis económica como el actual, es muy relevante: «Ese sobreprecio se debe a que esta parada militar es mucho mayor que la que se hace con motivo del Día de las Fuerzas Armadas, que sí es itinerante». En concreto, en los actos del 12-O del año pasado participaron más de 2.500 militares, según informó el Ministerio de Defensa.
«Gran parte del armamento, de la caballería, de los carros de combate que desfilan con motivo del Día de la Fiesta Nacional ya están en Madrid, y en ese nuevo escenario habría que trasladarlos al lugar que se elija, lo mismo que las tropas. Y además esa ciudad debe tener una infraestructura militar de cierta envergadura y unas características mínimas en cuanto a la amplitud de la avenida en la que se celebren los actos, porque en una pequeña la utilización de blindados, por ejemplo, es mucho más complicada», añaden las mismas fuentes.
La posibilidad de organizar la parada militar fuera de Madrid es vista con recelo por fuentes militares, que consideran que al tratarse del Día de la Fiesta Nacional lo más lógico es hacerlo en la capital de España. Para acercar los Ejércitos al resto de ciudades españolas, una idea que es apoyada de forma unánime en la milicia, ya está previsto el Día de las Fuerzas Armadas, que cada año se hace, con gran éxito además, en un punto distinto de nuestra geografía.
Clave política
Las fuentes militares consultadas desconocen si la iniciativa ha partido del Ministerio de Defensa, es decir, de Margarita Robles, o ha sido sugerida desde el Palacio de la Moncloa. En este sentido, aportan una clave política en una decisión como esta, si es que finalmente se materializa. Explican que sería una forma de quitar un elemento de protagonismo a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, cuando quedan pocos meses para que se celebren las elecciones autonómicas y municipales. Por supuesto, formalmente la decisión se vendería como una manera de simbolizar la diversidad de España y de acercar los ejércitos a otras comunidades, aunque la propia elección de la ciudad tendrá una lectura política.
En este sentido, se da por descartado que se elija Barcelona o alguna de las capitales del País Vasco para celebrar el desfile, ya que sería visto como una provocación por sus respectivos gobiernos nacionalistas. Sevilla también podría acogerlo y sería una oportunidad para reforzar las posibilidades del PSOE de revalidar la Alcaldía, pero es una plaza complicada en este momento tras el fracaso de este partido en las recientes elecciones autonómicas en Andalucía. La Coruña, con Galicia gobernada por el PP, y las capitales de Extremadura, Castilla-La Mancha y Castilla y León tendrían igualmente pocas posibilidades. Valencia, en este escenario, tendría muchas más oportunidades, en un momento, además, en el que el Ejecutivo de Ximo Puig, sostenido por el conocido como ‘pacto del Botànic’, atraviesa por serias dificultades.
Carga simbólica
Pero más allá de todo eso las fuentes consultadas ven, sobre todo, un problema simbólico. El Día de la Fiesta Nacional consiste, además de en la parada militar, en un acto de homenaje a los que dieron su vida por España y una recepción en el Palacio Real, donde el Rey recibe a las autoridades del Estado. Es allí donde el Jefe del Estado saluda a los representantes de todos los poderes y donde se visualiza con más claridad esa condición. Además, asisten representantes de todos los sectores de la sociedad, como el económico o cultural.
Sacar esa recepción del Palacio Real, a juicio de las fuentes consultadas por ABC, desnaturalizaría tan solemne acto ya que ese edificio tiene también una carga simbólica muy potente como residencia oficial de Felipe VI, aunque viva y tenga su despacho en el Palacio de la Zarzuela. Es, por tanto, la sede de la Jefatura del Estado y lo que se celebra es, precisamente, el Día de la Fiesta Nacional, por lo que no parece lógico trasladar la recepción a otro lugar, siempre según los medios consultados por ABC.
Que además el Rey vista para esa ocasión uniforme militar supone visualizar de forma clara que Don Felipe es también el Jefe Supremo de las Fuerzas Armadas, tal como precisa la Constitución.
Lectura institucional
Es decir, las imágenes de todo lo que sucede el 12-O tienen una lectura institucional muy importante. De hecho, es muy probable que sea el momento del año en que se aprecie con más nitidez cuál es la estructura del Estado. Por ello, introducir modificaciones de tanta envergadura como cambiar el lugar donde se celebra es visto con gran preocupación por los militares al tanto de estos planes.
«¿Alguien se imagina que el día de la fiesta nacional francesa se celebrase en Burdeos en lugar de París, o en Nápoles, en lugar de en Roma, en el caso de Italia?», se preguntan las fuentes consultadas por ABC. Y a partir de ese análisis no llegan a adivinar cuál puede ser la verdadera razón de que ahora el Gobierno de Pedro Sánchez se plantee celebrar la Fiesta Nacional de su país en otra ciudad que no sea su capital.