La juez aplaza la declaración de Alberto González, novio de Ayuso, hasta el 24 de junio
La pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid estaba citado este lunes como investigado por dos delitos fiscales y otro de falsedad documental
El abogado del novio de Ayuso: «Ciertamente se han cometido dos delitos contra la Hacienda Pública»
La titular del Juzgado de Instrucción número 19 de Madrid ha aplazado al 24 de junio la declaración del empresario Alberto González Amador, pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que se había señalado este lunes y que se ha suspendido durante la mañana cuando él ya estaba en el juzgado. Pasarían tres horas hasta que abandonase el edificio, por una puerta laterla, intentando sortear el despliegue mediático.
Según informan en fuentes jurídicas a ABC, la instructora ha aplazado asimismo la declaración de los cuatro empresarios que están investigados junto a él por la presunta expedición de facturas por servicios ficticios para que una de sus empresas minorase la cuantía del impuesto de sociedades.
De acuerdo a esas fuentes, el aplazamiento se ha propuesto por acuerdo entre acusaciones y defensas ante las dificultades que al menos dos de los investigados tenían para comparecer este lunes y martes por problemas en las citaciones.
Se ha sumado el hecho de que cuarenta minutos después de la hora prevista para la citación de González Amador, las 10 de la mañana, no habían podido empezar. Según algunas fuentes, se trataba de un fallo informático. En la Consejeria de Justicia de Madrid aseguran por contra que «todo funciona perfectamente».
En todo caso, con el cambio de fecha se persigue que el 24 de junio se produzcan todas las declaraciones y se pueda revisar la prueba documental sobre la marcha.
Para el diputado de Más Madrid en la Asamblea, Hugo Martínez de Abarca, aunque subyacen en efecto razones técnicas como el problema para las citaciones, el aplazamiento de hoy es «la guinda del pastel» a una conducta de la defensa de González Amador que ha calificado como «de escapismo, enmarañando el procedimiento desde el inicio».
Martínez, cuya formación ejerce la acusación popular en la causa, se explicaba así en declaraciones a los medios a las puertas de los juzgados, mientras la prensa asistía a una situación un tanto esperpéntica, pues ni González Amador ni sus letrados habían abandonado el edificio más de una hora después de finalizada la comparecencia.
Según informaron a ABC en fuentes de la seguridad de los juzgados, se disponían a salir por una puerta lateral pero al ver que allí también había afluencia de fotógrafos, volvieron al interior del edificio y entraron en un ascensor, sin que esté claro que hayan conseguido la misión de eludir que se capten imágenes.
Una fuente presente en los juzgados asegura haber visto cómo se colocaba una peluca canosa a su entrada con los letrados en el ascensor y se la retiraba al constatar que estaba siendo observado, pero fuentes de la defensa de González Amador han negado a ABC que llevase peluca alguna.
El hecho es que el empresario ha logrado sortear a la prensa a su llegada porque su aspecto físico dista mucho de las pocas imágenes que se han difundido de él, como ha podido constatar este diario. Finalmente, ha abandonado el edificio poco antes de las dos de la tarde, cuando se cierran las puertas principales y sólo queda una salida disponible. Ha utilizado un acceso lateral, pero no ha conseguido eludir las cámaras.
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