El PP busca rentabilizar el 'efecto Feijóo' en Galicia para recuperar poder local
28m: elecciones municipales y autonómicas (2)
Los socialistas esperan resistir el desgaste de la marca para aguantar las ciudades y diputaciones que gestionan con los nacionalistas
Análisis electoral (1) | PSOE y PP dirimen en las elecciones autonómicas y municipales en Valencia la primera vuelta entre el sanchismo y Feijóo
![Alberto Núñez Feijóo y Alfonso Rueda, ayer, en la Romería del PPdeG en O Pino](https://cf-images.eu-west-1.prod.boltdns.net/v1/jit/78527749001/23411e67-024e-49f4-8de7-6323aca3bc2e/main/1920x1080/26s613ms/match/image.jpg?pubId=55814260001)
En la escalera política de las próximas municipales, Galicia parece ir a la inversa que el resto de España. Si en el conjunto de la nación el PP examina el 'efecto Feijóo' en ciudades, municipios y comunidades autónomas, el finisterre galaico se enfrenta a lo ... contrario, a las primeras elecciones en catorce años sin el presidente de las cuatro mayorías absolutas al frente de la Xunta. Quien parece jugarse más este 28M no es el líder nacional del PP sino su sucesor en el gobierno gallego, Alfonso Rueda, en su primera campaña como mandatario regional.
El escenario electoral de las municipales en Galicia está repleto de paradojas. La más evidente tiene que ver con el propio Feijóo: el incontestable ganador de autonómicas no obtuvo nunca unos resultados abrumadores en municipales, con la excepción de aquel 2011 en el que la ola de desencanto contra el PSOE de Zapatero le brindó el gobierno de las tres ciudades de la provincia de La Coruña –Santiago, Ferrol y la propia urbe herculina–. Un espejismo que duró apenas cuatro años.
Hay una lectura a la inversa. Mientras los analistas plantean como requisito que el PP de Feijóo obtenga más poder territorial para poder afrontar con garantías su asalto a Moncloa a finales de año, la ausencia del mismo en Galicia nunca le privó de amplias mayorías en la Xunta. No iba a ser Galicia una excepción solo por que llueva (mucho) mientras España se seca.
En la Galicia de hoy, el PP no gobierna en ninguna de las siete principales ciudades. Fue primera fuerza en tres –por muy poco en La Coruña, de manera holgada en Ferrol y Lugo– pero quedó lejos de poder fraguar mayorías. Solo ostenta una Diputación provincial –Orense–, y gracias a un diabólico acuerdo con el populista Gonzalo Pérez Jácome, al que otorgó la alcaldía de la capital orensana a pesar de ser la tercera fuerza. El PSOE gestiona en minoría Santiago, Ferrol y La Coruña; Lugo, en coalición con el BNG; y en Pontevedra son el aliado del nacionalista Miguel Anxo Fernández Lores. Y luego está Vigo.
Apuestas populares
El punto de partida es tan pobre para el PP de Rueda que cualquier conquista será una buena noticia, pero todo pasa, en efecto, por traducir la victoria en las urnas en un gobierno municipal. Las expectativas populares están puestas principalmente en dos ciudades y una diputación. Se ven capaces de recuperar Ferrol, donde llevan dos elecciones quedándose a unas decenas de votos de la mayoría absoluta. La ciudad arrastra una maldición que la hace cambiar de alcalde cada cuatro años, indefectiblemente. Compiten en esta ocasión sus tres últimos, el actual Ángel Mato (PSOE), el anterior Jorge Suárez –antaño socio de Yolanda Díaz, hoy olvidado por la vicepresidenta– y el único que pudo gobernar con una absoluta, el popular José Manuel Rey Varela.
La otra gran apuesta del PP es Lugo. La socialista Lara Méndez acumula dos mandatos pero no acaba de consolidarse. Elena Candia es la candidata conservadora, y las encuestas la están situando a un paso de la absoluta, tras absorber la inmensa mayoría del voto de Ciudadanos, un partido que tenía en Lugo uno de sus bastiones con dos concejales. Va a desaparecer en toda Galicia. Se prevé un recuento en foto-finish, también en la Diputación, históricamente vinculada al PP pero que está en manos socialistas desde 2007.
![](https://static.abc.es/media/infografias/2023/04/elecciones-galicia-2019/elecciones-galicia-2019-desktop.png?v=1682789928596)
Principales ayuntamientos gallegos tras las elecciones municipales de mayo de 2019
En número de concejales
La Coruña
Mayoría absoluta, 14
9
1
9
6
2
PP
CS
PSOE
Marea
BNG
Santiago de Compostela
Mayoría absoluta, 13
8
10
5
2
PP
PSOE
CA
BNG
Lugo
Mayoría absoluta, 13
10
2
8
5
PP
CS
PSOE
BNG
Orense
Mayoría absoluta, 14
7
2
9
7
2
PP
CS
PSOE
DO
BNG
Pontevedra
Mayoría absoluta, 14
9
2
4
11
BNG
PP
CS
PSOE
Vigo
Mayoría absoluta, 14
4
20
2
1
PP
PSOE
Marea
BNG
ABC
![](https://static.abc.es/media/infografias/2023/04/elecciones-galicia-2019/elecciones-galicia-2019-movil.png?v=1682789929005)
Principales ayuntamientos gallegos tras las elecciones municipales de mayo de 2019
En número de concejales
La Coruña
Mayoría absoluta, 14
9
1
9
6
2
PP
CS
PSOE
Marea
BNG
Santiago de Compostela
Mayoría absoluta, 13
8
10
5
2
PP
PSOE
CA
BNG
Lugo
Mayoría absoluta, 13
10
2
8
5
PP
CS
PSOE
BNG
Orense
Mayoría absoluta, 14
7
2
9
7
2
PP
CS
PSOE
DO
BNG
Pontevedra
Mayoría absoluta, 14
9
2
4
11
BNG
PP
CS
PSOE
Vigo
Mayoría absoluta, 14
4
20
2
1
PP
PSOE
Marea
BNG
ABC
El PSOE, a resistir
Los socialistas se la juegan en dos ciudades donde, contra todo pronóstico, sus gobiernos locales no van a rentabilizar su gestión: La Coruña y Santiago de Compostela. A pesar de los constantes guiños del Gobierno de España a la capital coruñesa, la regidora Inés Rey no despega, mientras que el popular Miguel Lorenzo sube de manera notable. Peor es el caso compostelano, donde el alcalde Xosé Sánchez Bugallo retrocede, víctima del desgaste de su proyecto. El PP apuesta por un rostro joven, Borja Verea, que suscitó dudas en un comienzo pero que lleva meses encadenando subidas en los sondeos.
Los conservadores saben de lo difícil del reto, pero confían en que el viento de cola de la política nacional dé el empujón definitivo. Y si la subida es de las dimensiones necesarias, podría caer en el zurrón incluso la Diputación, que preside el líder de los socialistas gallegos, Valentín González Formoso. El PSdeG no lo contempla.
Esta es otra variable a considerar. El PSOE gallego acude a las municipales tras la rehabilitación de José Ramón Gómez Besteiro, su secretario general entre 2013 y 2016, que dimitió por su presunta implicación en casos de corrupción que se demostraron inexistentes. Desde comienzos de abril es delegado del Gobierno, y con toda probabilidad será candidato a la Xunta en las autonómicas. Vuelve a la primera línea para devolverle el ánimo a un partido que celebra también la designación como ministro de José Miñones, el anterior delegado gubernamental. El PSdeG se gobierna hoy entre La Coruña y Lugo. Malos resultados en ambos feudos generarían dudas sobre las expectativas de Besteiro.
En Orense, la legislatura municipal ha estado envuelta en la controversia, con un Jácome al que abandonaron la mitad de sus concejales entre acusaciones de irregularidades en la gestión de los fondos públicos que recibía el grupo, un PP entrando y saliendo de la coalición, denuncias en los juzgados que han acabado en nada, polémicas con los funcionarios... PSOE y PP han recuperado a antiguos exalcaldes, Paco Rodríguez y Manuel Cabezas, respectivamente. Cualquier cosa es posible. El PP se conformaría con una subida en la ciudad que le garantizara la absoluta en la Diputación.
Y luego están Abel Caballero y Vigo, sin saber muy bien dónde acaba uno y empieza el otro. El alcalde del 67% de los votos solo compite contra sí mismo y una eventual desmovilización de una parte –mínima– de su electorado que dé por hecho que seguirá siendo alcalde. Nadie discute eso. Es improbable que crezca más, porque sería a costa de un PP que necesita recuperar algo de pulso en la ciudad para soñar con la Diputación de Pontevedra, un objetivo inalcanzable si no se crece en Vigo. No lo tiene fácil la candidata Marta Fernández-Tapias.
Sumar, poco o nada
Estas municipales en Galicia servirán, también, para evaluar la fortaleza del espacio político de Sumar, el partido/plataforma de Yolanda Díaz. No se presenta como tal, pero sí lo hacen sus llamadas 'confluencias', las marcas como Marea Atlántica, Compostela Aberta, Ferrol en Común, que antaño auparon a la vicepresidenta cuando forjó En Marea, la plataforma con la que saltó a Madrid, hoy naufragada y desaparecida.
El espacio 'rupturista' cotiza a la baja, y su unidad ha saltado por los aires en La Coruña y Ferrol, donde Podemos concurrirá en solitario. El espacio político que en 2016 llegó a ser segunda fuerza política en Galicia luchará ahora por no desaparecer de las ciudades o ir más allá de una presencia testimonial.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete