Prisión para el presunto agresor de la mujer maniatada con una cadena de manos a cuello en Miranda
El juzgado acuerda su entrada en el cárcel tras tomar declaración a la víctima y a un testigo después de que el hombre, acusado de detención ilegal, quedar en libertad en un primer momento
Intento de asfixia, insultos y golpes, pero sin denuncia: lo que se sabe del caso de la mujer maniatada en Burgos
![La mujer, en el hospital de Miranda de Ebro, con la cadena al cuello](https://s1.abcstatics.com/abc/www/multimedia/espana/2023/11/24/mujer-encadenada-R2TGCUj2JQoNzmgIxfZE6vI-1200x840@abc.jpg)
Esta vez, sí. El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 2 de Miranda de Ebro (Burgos), ha acordado este viernes el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza, del hombre que presuntamente agredió a la mujer que el 20 de noviembre llegó al hospital maniatada de manos a cuello con una gran cadena de metal . Una decisión que ha adoptado tras tomar declaración a la víctima y a un testigo que, al parecer, estaba en la vivienda en el momento en el que sucedieron los hechos.
El hombre está siendo investigado por detención ilegal, «sin perjuicio de que la calificación pueda variar conforme avance la investigación», según han señado desde el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL).
Esta decisión llega después de que este jueves ni la Fiscalía pidiera prisión para el presunto autor de los hechos ni la propia víctima solicitara medida de protección alguna.
La mujer habría trasladado a los agentes que al entrar en la casa del hombre, fue golpeada hasta quedar inconsciente. Al despertar, según trasladó, vio que estaba atada con una cuerda a la altura del cuello, de la que el hombre estaba tirando con intención «de asfixiarle». Mientras profería insultos y seguía golpeando, agarró una cadena de metal con la que maniató a la mujer de manos a cuello.
Según señaló en ese primer testimonio ante la Policía Nacional, en un momento en el que perdió la vigilancia del hombre, logró escapar y refugiarse en casa de unos familiares. Fueron quienes llevaron a la mujer, de mediana edad, hasta el hospital, donde los sanitarios no podía dar crédito a la imagen. Además de atender a la víctima, con heridas sobre todo en el cuello y en el rostro y visibles moretones, avisaron a los servicios policiales, que comenzaron la investigación.
Lograron detener el presunto agresor, un hombre al parece que ya había cumplido condena recientemente durante varios años por otra detención ilegal, además de agresión sexual, a una menor. En ese primer momento, quedó en libertad tras prestar declaración ante el juez. Ni la Fiscalía pidió su ingreso en prisión provisional ni la víctima reclamó medida de protección alguna.
Sin embargo, este jueves a última hora de la mañana, el Ministerio Fiscal remitía un escrito al Juzgado número 2 de Miranda de Ebro en el que solicitaba que se tomase declaración a la perjudicada a fin de valorar la posibilidad de adoptar nuevas medidas cautelares, así como a un testigo. Ambos han pasado en la mañana de este viernes por la sede judicial, tras lo que el magistrado ha acordado el ingreso en la cárcel del supuesto autor de los hechos.
Por la fecha en que ocurrieron los hechos investigados, el Juzgado nº2 de Miranda se inhibirá al Juzgado nº1, que se encargará de realizar la instrucción y de llevar a cabo las diligencias oportunas para esclarecer lo ocurrido.
Según el relato de la mujer, todo comenzó precisamente en el Hospital Santiago Apóstol de Miranda de Ebro donde terminó siendo atendida de la agresión. Allí estaba cuidando a una amiga y el hombre se ofreció para acercarle al centro de la localidad. Ella, que al parecer lo conocía de vista, accedió y una vez «ganada su confianza», accedió a entrar en su casa al decirle él que tenía que entrar a recoger algo. Ya en el interior, dijo a los agentes, fue cuando comenzó a recibir los golpes, hasta quedar inconsciente y ser encadenada. Por la ventana, logró escapar.
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