La madre y los tres hijos menores fallecidos en el accidente de tráfico en Segovia serán repatriados a Tánger
Riaza guarda cinco minutos de silencio en señal de duelo por sus vecinos
Una mujer y sus tres hijos menores, dos de ellos bebés, fallecen en el choque de un turismo y un camión en Segovia
El municipio segoviano de Riaza mostró ayer su dolor por el fallecimiento el martes de cuatro de sus vecinos –una madre y sus tres hijos– en un accidente de tráfico ocurrido en la carretera N-110, en el término de Aldealengua de Pedraza. Lo hizo con cinco minutos de silencio en su plaza mayor, precisamente en una de cuyas viviendas residían las víctimas, una mujer de 36 años y sus tres hijos, uno de cinco y los mellizos de casi dos. Una familia de la que sólo ha sobrevivido el padre que ayer continuaba a la espera de disponer de los cuerpos, tras la realización de las autopsias, para su repatriación a Tánger, de donde son originarios.
El ayuntamiento de Riaza hizo pública una declaración institucional para, en nombre de todos los vecinos, unirse "al dolor de la familia y mostrarles nuestro apoyo y condolencias en estos duros momentos por la pérdida de Mouna, Zaid, Reda y Riad, la madre y los tres niños».
El alcalde de Riaza, Benjamín Cerezo, destacó cómo las instituciones se han volcado en ayudar tras el trágico suceso, desde la Subdelegación del Gobierno, a la Delegación Territorial de la Junta y la Diputación. Además del apoyo económico y psiológico necesario para estas situaciones, se trata de agilizar todo lo posible los trámites para la repatriación de los cuatro cuerpos.
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El municipio segoviano continúa conmocionado por lo sucedido con esta familia de origen marroquí que, según detalló el propio alcalde, estaba perfectamente integrada, como todos los vecinos de la misma nacionalidad, unos 200, que residen en esta localidad atraídos por la ofertas de trabajo en la industria cárnica y la construcción. El consistorio habilitó ayer el centro cultural para acoger a los familiares de los fallecidos, en su mayoría mujeres, ya que los hombres, incluido el marido y padre de las víctimas, continuaban en Segovia a la espera de recibir los cuerpos.
Mientras, siguen las investigaciones sobre las causas que provocaron el accidente y, sobre todo, por qué la conductora del Ford, la madre que viajaba con los tres niños, invadió el carril contrario y chocó brutalmente contra un tractocamión, cuyo conductor, según declaró, no tuvo tiempo de esquivar al vehículo.
La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, aseguró que «en estos momentos la Guardia Civil y el subdirector de Tráfico están realizando las debidas investigaciones» y precisó que son importantes «también los datos que pueda revelar la autopsia para saber si en esta invasión del carril contrario medió alguna causa médica o alguna indisposición».
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