Los hijos de Pedro Muñoz defienden que la relación de su padre y su exmujer era buena

La hija del exconcejal Pedro Muñoz, que estuvo en la casa de Toreno (León) la noche en la que la pareja de su padre sufrió las lesiones por las que quedó parapléjica, ha asegurado ante el juez que Raquel Díaz nunca le dijo que sufriera malos tratos. Respecto a las múltiples llamadas entre ella y su padre ese mismo día, ha indicado que el motivo era «banal» y que muchas fueron llamadas perdidas por la falta de cobertura. Después de avisar al 112 para contar su versión de lo ocurrido, Pedro Muñoz volvió a llamar a su hija y le dijo que Raquel «se había caído» y que «por favor subiera a ayudarle». Cuando llegó, vio ya las luces de la ambulancia. «Raquel estaba tumbada boca arriba, se la veía comatosa, muy mal, con la respiración agitada, entrecortada y no reaccionaba a ningún estímulo», ha asegurado en el juicio, según informa en su web La Nueva Crónica.

La hija de Pedro Muñoz ha declarado que no vio que nadie limpiara en la casa y cuando le preguntaron por la entrada y registro que se hizo varios días después y en las que se dijo que la escena había sido modificada subrayó que su hermano «colocó todo» porque «se iba a trasladar a la finca y estaba todo bastante desordenado». La testigo de la defensa ha asegurado que la relación entre su padre y la que era su mujer era muy buena cuando estaba ella delante y que, pese a que a veces hablaban de la posibilidad de un divorcio «no me lo tomaba en serio».

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En la misma línea, otro hijo de Pedro Muñoz, ha reconocido que limpió la casa y que las cosas de Raquel Díaz las metió en bolsas que sacó a la galería. «Si alguien vino y las cogió después no lo sé», ha afirmado, «imagino que vino alguien de su familia a cogerlas». Le han preguntado también por el intento de hacer una donación de los bienes de su padre a él y su hermana que fue frenado y respondió que cuando Pedro Muñoz ingresó en prisión preventiva, donde estuvo dos años, él se hizo cargo de las cuentas y vio que su situación era «crítica» que lo que tenía eran 5.000 o 6.000 euros y las propiedades y que lo que querían era venderlas para tener liquidez y pagar a un buen abogado. El testigo ha señalado que la última vez que estuvo con ellos, en la nochevieja de 2019, meses antes de los hechos enjuiciados, »los vi muy bien, muy felices».

También ha comparecido ante el juez la exmujer de Muñoz. Tras ser preguntada sobre si había sido maltratada, ha respondido con un «no», al menos que ella fuera «consciente»