PSCL, guerra total

El PSCL está en Estado de Guerra Total. Ni judíos, ni palestinos. Nadie tiene la razón y todos defienden su verdad. Algo así pasa en dos frentes que se han ido creando a lo largo de estas últimas semanas y aquí lo hemos estado relatando y analizando, con permiso de Montse Serrador, nuestra gran cronista de Cortes autonómicas. El status quo de doble condición de candidato para la Junta y secretario general no se va a volver a repetir. Tudanca tiene que mover ficha. Ni a Alberto Ruiz Gallardón, ni a José María Aznar dieron igual oportunidades como pretende el burgalés. Cuenta con la mayoría de la Ejecutiva regional actual, pero no con los barones, esto es, alcaldes y presidentes de Diputación. Ésos, en su amplia mayoría, han establecido la clásica postura de «respetar las decisiones de Ferraz, aunque reconocemos la labor del secretario general». O sea, ambigüedad para no mojarse. Esperar a ver qué pasa.

El que se pone al partido por montera es el alcalde de León, José Antonio Diez, que ni con Tudanca y su pretendida elección exprés, ni con Cendón y todo el ejército de cargos que lleva detrás. El actuar de verso libre, el social-leonesismo le va bien y para qué cambiar.

Mientras tanto, la bola del sanchismo antitudanca crece, el delegado del Gobierno, Nicanor Sen; el diputado Alfonso Cendón; el ministro Óscar López; el secretario de Organización, Santos Cerdán; el alcalde de Soria, Carlos Martínez, el ministro Óscar Puente… La lista se alarga cuando se sondea cada provincia, cada agrupación. Pero la guerra que antes era fría y silenciosa, ahora es cada vez más evidente. Luis Tudanca hace una finta al sanchismo declarando su fidelidad al modelo federal de las autonomías, en contra de la «una, grande y libre del PP». Ya no sabe cómo hacer para que el amado líder le unja con su mano y le consagre candidato crónico a la Presidencia de la Junta.