agricultura
El cordero de Córdoba abre puertas en el mercado musulmán por el Ramadán
Los ganaderos cordobeses encuentran un rayo de esperanza para el sector
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Numerosos factores han jugado en contra del sector del ovino de carne en Córdoba en los últimos años. Entre ellos destaca la caída del consumo de este producto en España, los elevados costes de producción, la falta de lluvias y la falta de relevo generacional en las explotaciones. Este cóctel explosivo ha provocado que no pocas granjas hayan tenido que echar el cierre ante la imposibilidad de poder continuar con su actividad. Sin embargo, un rayo de esperanza ha aparecido desde hace algunos ejercicios por el crecimiento de las ventas en países musulmanes y entre la población que profesa esta religión en distintas partes de Europa.
Gran parte de esta comercialización se lleva a cabo en primavera por el Ramadán, celebración con la que los seguidores de estas creencias conmemoran la revelación de los primeros versos del Corán por parte de Mahoma. Su comienzo este año tuvo lugar el pasado 22 de marzo y hasta el 21 de abril los musulmanes guardarán ayuno durante las horas del día. Una vez transcurran 70 días se celebrará la llamada Fiesta del Cordero, que en este caso coincide con el 28 de junio y en la que es tradicional comer este animal en familia. Aunque el consumo del producto se produce en ese momento, las empresas cordobesas ya han empezado a recibir y enviar pedidos por este motivo.
Así lo puso de manifiesto a ABC el presidente de Merinos del Sur, Gabriel Pineda, al asegurar que ya hace un mes en esta cooperativa con sede en Belalcázar se iniciaron las primeras operaciones vinculadas al Ramadán fuera de España. «A partir de entonces enviamos mercancía con bastante ritmo, algo que compensa en cierto modo la pasada campaña de Navidad, que para nosotros ha sido un desastre», reveló este directivo. Según informó, la comercialización de cordero a estos países ya supone en torno al 30 por ciento del volumen de negocio de la firma ganadera, cuya facturación en 2022 alcanzó los 12 millones de euros, «y cada año la demanda va a más».
Pineda indicó que hay algunas diferencias entre los animales que venden a estos países y los que se oferta a la población española. «En lugares como Jordania y Arabia Saudí se prefiere comprar corderos vivos de un mayor peso que aquí, ya que alcanzan los 30 kilos en esos destinos, tres veces más que en nuestro país», remarcó el máximo responsable de Merinos del Sur, aunque también subrayó el crecimiento número de encargos procedentes de naciones europeas con un gran número de habitantes musulmanes, como es el caso de Francia y de Portugal.
Dos lunares en el crecimiento de este mercado. Por un lado, los costes de producción, que «en nuestro caso se ha multiplicado por cuatro al necesitar más alimentación animal a causa de la sequía», y, por otra parte, «no hemos repercutido del todo estos mayores gastos en los precios por la dura competencia en esta zona del mundo con Australia y Nueva Zelanda».
Las Albaidas
El gerente de Ganadería Las Albaidas, Felipe Molina, también afirmó que «las exportaciones de las cooperativas con las que trabajamos al mercado árabe no han dejado de incrementarse, lo que supone una importante oportunidad para el sector dado que se trata de una población que alcanza los 1.500 millones de personas en el mundo».
En lo que se refiere a esta firma, los destinos de sus ventas se han ido elevado con el paso de los años, llegando actualmente a Jordania, Arabia Saudí y Libia, pero en 2020 notaron una subida mayor cuando muchos creyentes mahometanos de países europeos como Francia, Bélgica o Alemania no pudieron acudir a sus lugares de origen a celebrar el Ramadán a causa de la pandemia, «algo a lo que también nos ayudó la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea (UE) al dificultarse más las operaciones con ellos», según aseveró.
En el caso de Las Albaidas sí han percibido un aumento del precio que reciben por sus producciones. Molina detalló que las cotizaciones este año se han colocado de media en los 87 euros por pieza, frente a los 70 que se pagaban hace tres años, lo que supone que en ese periodo ha avanzado algo más de un 24 por ciento. Sin embargo, a su juicio, esos valores son insuficientes para poder cubrir las fuertes subidas de sus costes, sobre todo en lo que se refiere al pienso, los carburantes o los envases.
«Los precios deberían llegar al menos a los 120 euros para poder ser rentables, puesto que, si no es así, seguirán desapareciendo explotaciones como ha ocurrido últimamente», declaró el representante ganadero. Desde su punto de vista, las ventas a los países musulmanes continuarán creciendo en los próximos años, pero «es necesario que se hagan más campañas para fomentar el consumo de cordero entre la población joven española».
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