AJUSTE DE CUENTAS
De qué regeneración me habla
Sánchez acierta: la confianza institucional en España se ha hundido
De Cos subraya los riesgos de la incertidumbre política y pide «grandes consensos» para no afectar al crecimiento económico
El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos
La confianza en las instituciones mereció una referencia importante en la que probablemente sea la última comparecencia del gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ante el Congreso antes de dejar su cargo en junio próximo. La calidad del marco institucional y ... el grado de confianza que despiertan las instituciones entre los actores económicos son un determinante importante a largo plazo de la prosperidad económica de un país.
El diagnóstico del gobernador no fue halagüeño. «De acuerdo a distintos indicadores comparables a nivel internacional, desde la crisis financiera, se ha producido en nuestro país una caída en la confianza y en la calidad institucional más acusada que en otros países de nuestro entorno», dijo. Su afirmación iba acompañada de una lámina que reproducimos aquí al lado. En ella se aprecia cómo ha evolucionado la confianza en los partidos políticos, la Justicia, el gobierno nacional y el Parlamento entre 2007 y 2023 en una serie escogida de países con los que nos gusta compararnos. Las diferencias de España con todos los demás países son estadísticamente significativas al menos al 5% para todos los indicadores, con la única excepción de la comparación con Francia para el gobierno nacional.
Estos datos le dan la razón al presidente del Gobierno de que existe una necesidad de regeneración democrática en España. Desgraciadamente, él es, al mismo tiempo, uno de los grandes responsables de la situación de deterioro de la confianza que hemos alcanzado y hay grandes dudas de que proceda con la falta de sectarismo necesaria para conseguirla. Para recuperar la confianza hay que impulsar la eficacia y eficiencia de una Administración que nada en recursos tras batir récords de recaudación en los últimos tres ejercicios. Con más dinero que nunca, el Gobierno se aplica menos exigencias que antes en la carrera de los empleados públicos que tendrá un reflejo inevitable en la calidad de la prestación de los servicios públicos. jmuller@abc.es