Tenis
Alcaraz tumba a un inspirado Hurkacz y jugará la final de Róterdam ante De Miñaur
El español remonta y derriba al polaco para jugarse con el australiano el primer título en un torneo bajo techo (6-4, 6-7 (5) y 6-3)
![Alcaraz, durante el partido contra Hurkacz](https://s2.abcstatics.com/abc/www/multimedia/deportes/2025/02/08/alcaraz-reuters-RjR05W9BwGnXXFXaylVgBON-1200x840@diario_abc.jpg)
Se gana Carlos Alcaraz la plaza en la final del ATP 500 de Róterdam (domingo 9 de febrero, no antes de las 15.30 horas, Movistar+) con el mérito de la concentración y de la confianza, de saber aguantar y ordenarse, de creer en él le pese a quien le pese, incluso con un Hubert Hurkacz, 27 años y 21 del mundo, que mostró la firmeza de un muro y la contundencia de una catapulta. Pero este Alcaraz se mueve ya de maravilla en los retos, sin desafinar ni despistarse ni un segundo porque el premio lo merece: en la primera final de un torneo bajo techo, a un solo paso llamado Alex de Miñaur de conquistar unas condiciones que, hasta el momento, le han sido adversas.
ATP 500 Róterdam
Semifinal
|
6 | 6 | 6 |
|
4 | 7 | 3 |
El español salió algo más aletargado que en las rondas previas. Y la incomodidad se multiplicó en cuanto Hurkacz sacó sus potentes palancas a pasear. Saques imposibles, remates más difíciles aún y cierta pericia para defenderse desde el fondo con buena mano, globos precisos y potencia en los latigazos paralelos. Todo lo fácil que había sido la ronda de octavos contra Vavassori y la de cuartos contra Pedro Martínez se tornaba complicadísimo en el inicio del choque para el español, que iba a la toalla en cada intercambio para intentar limpiarse el agobio.
El polaco, que ya había demostrado ser muy difícil de derribar en los tres choques anteriores con el español (todos saldados con victoria para el murciano, pero con complicaciones y 'tie breaks' como tónica), tomó el mando al inicio del set con inusitada firmeza, tanto de mano como de cabeza, y obligó a Alcaraz a subir el nivel que no le habían exigido en todo el torneo. Para respiro, y puño en alto para empezar a animarse, dos derechas ganadoras, una cruzada y otra paralela, lo impulsaron para sumar el primer juego y frenar el 0-3 del rival. Al fin, una pequeña solución para intentar horadar la torre que tenía enfrente.
Le costó al español mover a Hurkacz de esa posición de privilegio en la que se había instalado con su saque y sus golpes planos. Trató de ser más agresivo, subir más a la red, lo atrapaba casi todo el polaco, que incluso tuvo tres bolas de 'break' para el 5-1. Pero se levantó Alcaraz con orgullo y algo de suerte, que todo vale, y fue un poso de confianza con el que fue alimentando su ilusión y creando cierto nerviosismo en el rival.
Los primeros servicios ya no eran cien por cien efectivos y Alcaraz, con paciencia y calma, fue encontrando algún resquicio por donde meterse y sacar su plan de juego. Después de levantar tres bolas de rotura, consiguió la suya propia, con dos puntos «made in Alcaraz» que levantaron el ánimo de la grada y del español y bajó las revoluciones del polaco.
🤯 TRULY REMARKABLE 🤯
— ATP Tour (@atptour) February 8, 2025
Incredible quality of tennis from @carlosalcaraz & Hurkacz! @abnamroopen | #abnamroopen pic.twitter.com/e4lLF0z1XL
Un 3-4 que convirtió en 4-4 en blanco con la confianza ya en su lado de la red. Ya eran sus derechas las que comandaban los puntos; sus restos, los que ponían en una encrucijada al rival; sus pasantes, los que comenzaron a derribar la torre moral de Hurkacz, que terminó cediendo su propio saque con una doble falta. El efecto Alcaraz, del casi 1-5 al 5-4 y saque.
El «Vamos» retumbó en el Rotterdam Ahoy cuando su derecha no encontró respuesta. El sufrimiento se había convertido en alegría, una sufrida, de las que más enriquecen. Alcaraz notó el cambio de dinámica, que ahora sí el partido empezaba a ser suyo, a tener los puntos bajo su control.
Para el segundo set, Hurkacz se rehízo, reagrupado de nuevo su tenis para aguantar sus turnos de saque y animarse con puños al aire; Alcaraz también se mantuvo alerta y con velocidad de piernas para seguir con ese aire de confianza con el que se levantó del sufrimiento en la primera media hora de partido. Muy firmes los dos, ninguno pudo desequilibrar el saque del rival y tal y como señalaban las estadísticas y el historial entre ambos, el segundo capítulo se resolvió en el 'tie break'.
No es una quiniela, hay poco de azar y sí mucho de paciencia, cabeza y confianza. Y fue por oleadas. Un 'minibreak' impulsó a Alcaraz, pero le fallaron los nervios con 5-4 y saque. Una doble falta inoportuna que dio alas a Hurkacz, que logró forzar otro error de su rival y su 'minibreak' lo solventó con un saque inapelable de los suyos. La final, al tercer set.
BREAKING: Supernatural activity has occurred in Rotterdam 🚨🌍@carlosalcaraz is out of this world!!! @abnamroopen | #abnamroopen pic.twitter.com/duC0E1As6l
— ATP Tour (@atptour) February 8, 2025
Toda la cabeza que Alcaraz no pudo poner en juego en el 'tie break', la tuvo en ese capítulo definitivo. Su reacción ante ese error fue olvidarlo todo y empezar de cero, con la misma dinámica ilusionante, las mismas piernas veloces y el control en los puntos largos que había llevado toda la hora anterior. A Hurkacz le pesó el esfuerzo físico y mental y se le debilitaron los brazos. Entre uno y otro, un abismo de fuerzas y ánimos demasiado grande que se tradujo en un 3-0 rapidísimo a favor del español.
Un estirón que fue una losa insalvable para Hurkacz, aunque desplegó aún sus mejores saques para acercarse en el marcador, pero era Alcaraz el que mantuvo el control en todo momento. Mucho más ágil, logró mantenerse por delante sin temblar esta vez, y hasta apuró sus opciones de cerrar el partido al resto porque, a pesar de las casi dos horas, los extremidades volaban sin descanso ni signos de fatiga. No fue al resto, pero sí con su propio servicio, sin más fallos en su mano ni temblores esta vez.
Una victoria inapelable, de remontada descomunal en el primer set, de gestionar emociones en el segundo y de contundencia en el tercero. Alcaraz, en la final del ATP 500 de Róterdam por méritos absolutos. Ya solo queda un escollo, Alex de Miñaur, para levantar su primer título bajo techo. Y con la seguridad de que tiene recursos tenísticos y capacidades de reacción para tumbar cualquier torre.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete