MOTOGP
MotoGP, el último reducto de las azafatas
motoGP
El Mundial de motos se ha quedado como el único gran deporte que incorpora modelos a su pasarela
![Marc Márquez, acompañado por una azafata en Jerez](https://s1.abcstatics.com/abc/www/multimedia/deportes/2022/09/24/azafatas-RDetuINCIge5g9D1KWmi6iP-1240x768@abc.jpg)
El movimiento giratorio empezó hace seis inviernos en las antípodas, una carrera ciclista que marca el comienzo de la temporada llamada Tour Down Under. A miles de kilómetros se materializó una de las leyendas urbanas que jamás terminaban de plasmarse y que tenía que ver ... con la honorabilidad o la integración. El gobierno de Australia del Sur suprimió el protocolo de las azafatas en el podio y las sustituyó por jóvenes ciclistas. El efecto boomerang de la medida se extendió como la pólvora al cabo de unos años, la Fórmula 1, el Tour de Francia, la Vuelta a España, las principales competiciones que empleaban a modelos como imagen pública eliminaron este episodio de sus vidas. Así hasta hoy. Todos, menos uno. El Mundial de MotoGP se ha quedado como el último reducto de un estereotipo que genera controversia y un revolutum de opiniones a favor o en contra.
Este fin de semana, en el circuito japonés de Motegi o el pasado domingo en MotorLand de Alcañiz, las motos han proyectado su criterio respecto a un asunto que provoca irritación social. Esa imagen que para muchos es ya parte del pasado, las chicas con el paraguas para dar sombra al piloto, impertérritas y sonrientes, mientras el gladiador con la moto está punto de lanzarse al asfalto abrasador.
Publicidad con tintes vejatorios y chicas instrumentalizadas sexualmente para unos, un trabajo remunerado y digno como cualquier otro para el bando opuesto en el pensamiento.
«En nuestro campeonato tenemos azafatos y azafatas y ellos son trabajadores del Mundial de MotoGP -explica a ABC Ignasi Sagnier, director de comunicación en la empresa organizadora, Dorna-. Hay personas que tienen sus estudios universitarios y esto supone un complemento. Hay otras que lo tienen como trabajo único. Para nosotros son un trabajador más».
Cada equipo del campeonato eligen su posición respecto a las antiguas 'pit babes', así eran conocidas las chicas de la parrilla antes de que el movimiento en cadena decretado en la carrera ciclista australiana se llevase por delante este formato. «Cada equipo decide si lleva azafata, azafato o ni uno ni otro. La decisión depende unas veces del interés del patrocinador, del criterio del equipo o del presupuesto», comenta Sagnier.
Hace un lustro llegaron a las parrillas de MotoGP los paragüeros, chicos guapos y musculados que con su presencia hacían frente a la saturación sexual del paddock en versión femenina. Fue una contribución visual de algún equipo aportando belleza masculina como reclamo hacia sus patrocinadores.
Mucho más allá en esta escalada del culto al cuerpo fue la piloto Ana Carrasco, la primera mujer en ganar una carrera frente a los chicos en el Mundial de motociclismo. La murciana estuvo acompañada por un modelo masculino con el torso al aire, desnudo desde la cintura en la presentación del Gran Premio de Holanda de 2014.
«Lo único que pedimos es cierta corrección en la vestimenta -amplía el portavoz de MotoGP-. Si algún equipo se pasa de la raya o no cumple con un mínimo sentido común, se le da un aviso. No hemos tenido ningún problema con este protocolo».
En el baúl del olvido se ha guarecido aquella imagen del ciclismo, en la que dos modelos con los labios rojos besaban, una por carrillo, al ganador de etapa en la Vuelta a España, el Tour de Francia o el Giro de Italia. El simbolismo de aquel gesto se interpretó durante años como si las azafatas también fueran incluidas en el premio para el triunfador.
«Nosotros nos negamos a llamarlos azafatas o azafatos, sino que son asistentes de protocolo -cuenta a ABC Javier Guillén, director general de la Vuelta-. No es solo entregar el premio, sino ordenar y acompañar a las autoridades regionales que lo entregan, y proporcionar una imagen. Actualmente estamos en política Covid. Si el año próximo desaparece este protocolo Covid, volveremos a la alternancia hombre/mujer en el podio».
La pandemia ha atenuado los dilemas éticos por un tiempo. Las restricciones obligaron a una política de mínimos en la presencia de personal no indispensable en el paddock de MotoGP. Solo los mecánicos, los ingenieros y los responsables técnicos de los equipos tenían acceso a la estancia donde todo se mueve en las carreras. «Durante la pandemia se decidió restringir al máximo la entrada para evitar contagios y propagación del virus -comenta Ignasi Sagnier-. Se suprimió temporalmente la presencia de azafatas, invitados y vips. Ahora nuestros trabajadores han vuelto en silencio».
La Fórmula 1, un deporte donde prima la exclusividad y el acceso restringido como esencia de vida, eliminó el concurso de las modelos en la parrilla, cartelito del piloto y poca ropa, en febrero de 2018. «Esta costumbre no encaja con los valores de nuestra marca y está claramente en desacuerdo con las normas sociales actuales», describió el jefe de operaciones de la F1 Sean Bratches. «La práctica no es apropiada o relevante para la F1 y sus aficionados, los antiguos y los nuevos».
Un repaso visual al historial de imágenes en MotoGP describe una exacerbada propensión a la exhibición sexual del personal femenino. Cierta procacidad ambiental que el tiempo ha dulcificado hacia unos perfiles más refinados.
«En nuestro deporte no hay ningún dilema ético ni problema moral porque, repito, las azafatas y azafatos trabajan como cualquier otro empleado en ejercer una labor -finaliza el portavoz del MotoGP-. Si otros deportes las han anulado, nos parece perfecto. Para nosotros son unos trabajadores más del paddock».
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete