¿El mejor deportista español de la historia?

Un caso a la inversa de Rafa Nadal, genio global, mundial, quien se retira con un reconocimiento total, un país entregado a su figura, a sus gestos con el puño y sus remontadas, sus títulos, sus 22 Grand Slam, su gobierno implacable en la tierra de París. Veinte años así, acompañándolo en cada revés, cada 'passing'. Y a base de repetirlo se ha grabado en la memoria una leyenda en su despedida: Nadal es el mejor deportista español de todos los tiempos. Más que los pioneros en sus deportes (Ballesteros, Ángel Nieto, Fernando Alonso), más que los monstruos sagrados (Miguel Induráin, Pau Gasol), más que el futbolista que hizo temblar al país (Iniesta) o que la heroína del bádminton (Carolina Marín).

Pero ¿qué opinan los deportistas, los que, como Nadal, se han recuperado de lesiones, han enfrentado a rivales durísimos o han escalado en su deporte? En el adiós de Rafa Nadal, ABC tantea a los mejores deportistas de España, de ayer y de hoy, y, aunque no sirva como muestra científica, la unanimidad no es total respecto a la hegemonía indiscutible del tenista de Manacor.

Ruth Beitia conquistó el primer oro de una atleta española en unos Juegos Olímpicos. Número uno en Río de Janeiro 2016, además de bronce en Londres 2012 y tres veces campeona de Europa. Para Beitia, el trono es de Nadal. «Sin duda, mi mejor deportista es Rafa Nadal. Después tengo muchos otros. Amaia Valdemoro, tres anillos, casi nada. Carolina Marín, no se puede pedir más a una deportista. Fermín Cacho».

El gallego Iván Raña fue pionero en un deporte que cautiva a las actuales generaciones, el triatlón, y que hace años era casi clandestino en un país sin tradición. Raña tiene otros gustos: «Para mí el mejor deportista español es Miguel Induráin, no solo por el tema deportivo, es increíble su palmarés. Ya sé que otros tienen también un gran palmarés, pero Induráin fue único por el saber estar que transmitía, lo he valorado muchísimo, era un fenómeno que aplastaba el pedal y pedaleaba de una manera que hoy no se ve a nadie igual. En las carreras, que eran una guerra, siempre demostraba clase, sin crispar a los rivales, sin gestos de rabia al llegar, muy natural y relajado todo. Hoy día sigue transmitiendo lo mismo. Induráin es el deportista y la persona de referencia para mí».

Asoma el nombre que puede discutir el liderazgo en este ránking de celebridades a Nadal. Miguel Induráin y sus cinco Tour, sus dos Giros, su récord de la hora, el Mundial contrarreloj o aquella plata detrás de Olano en Colombia. Pero, sobre todo, el campeón humilde, la persona a quien definió así su cardiólogo de cabecera, José Calabuig. «Su carácter consiste en evitar la confrontación . No conoce la soberbia y carece de cualquier afán de protagonismo. Es una persona sencilla pero con valores morales superiores. Incapaz de concebir el mal».

Iván Raña aporta un segundo nombre: «A mí me gustan mucho los coches y Carlos Sainz padre debería estar ahí muy arriba por todos los años que lleva, por el salto de una modalidad, los rallys, que son velocidad, a otra, que es el todo terreno, y estar ahí siempre ganando».

Jesús García Bragado hace gala de otro lucimiento personal: es el deportista español con más participaciones en los Juegos Olímpicos (8), desde Barcelona 1992 a Tokio 2020. Bragado vuelve a Nadal: «El mejor deportista para siempre es Nadal, lo que ha conseguido en el aspecto deportivo es muy representativo de España y su historia. Todos los Roland Garros, los otros Grand Slam, superando a rivales legendarios, marcas de Bjorn Borg. No se quedó ahí, ganó Wimbledon, Australia, Open USA, medallas olímpicas. Su ascendencia mundial se plasmó en los Juegos de París, los franceses le reservaron un lugar especial de protagonismo».

El marchador define el podio: «El siguiente es Miguel Induráin, sus cinco Tours fueron una época dulce. Representa ese gran momento del deporte español. El tercero es Fermín Cacho, por lo que supuso Barcelona 92 en lo histórico y lo deportivo. Fue algo más que su éxito personal, fue el éxito del deporte español».

Marcus Cooper Walz fue el abanderado español en los recientes Juegos de París al disponer del mejor bagaje olímpico, oro en Río 2016 en K1, plata en Tokio 2020 y el posterior bronce en la cita de París en el K4. El piragüista no se pronuncia: «De verdad que no sabría decir quién es el mejor deportista de la historia de España. No lo tengo nada claro, y tardaría mucho en analizar todos los factores que hay que valorar para dar y quitar mérito a un deportista».

Pedro Delgado ganó un Tour de Francia (1988) y fue ídolo total de los españoles veteranos. Personaje singular y tipo reflexivo, asegura que «para mí el gran deportista español de siempre fue Miguel Induráin, por la buena imagen que transmitía, por lo campeón que era y por ese carácter y personalidad tan suyas. Opino que Nadal ha llegado a su altura. Los españoles hemos sacado pecho por disfrutar a un campeón como Nadal».

Cuando la Fórmula 1 ocupaba la trastienda del deporte en España, Pedro de la Rosa trataba de hacerse hueco en ese mundo anglófilo y exclusivo. Su favorito es otro: «Es difícil nombrar a un solo deportista con tantos tan geniales, pero para mí es Fernando Alonso. Es el primer campeón del mundo español de F1. Fue pionero, abrió puertas a otros en un deporte muy complicado, con pocos recursos y proveniente de un país con una cultura e industria limitadas en el motorsport. Todo cambió gracias a él. Sus más de 400 carreras al máximo nivel, más de 20 años, fin de semana tras fin de semana a un nivel extraordinario, normalmente con coches que no podían soñar con victorias en otras manos».

José Manuel Rodríguez Uribes, el secretario de Estado del Deporte, regresa a la senda original: «Objetivamente Nadal es difícil de igualar por todo lo que ha hecho. Los datos son difíciles de discutir. Tiene el reconocimiento de Francia por sus Roland Garros, aquella final de Wimbledon ante Federer. Pero no es el único en España, tenemos a Pau Gasol, a Carolina Marín. Pocos países podrán decir que a alguien como Nadal le sustituye Carlos Alcaraz, un tenista de esa dimensión…».