Es fútbol y es femenino
Antes la cantante Aitana que la futbolista Athenea en el Bernabéu
El Real Madrid cerró su estadio a las cantantes hasta que se vaya el ruido. Ya se lo tenía negado a sus jugadoras (el único club de la Liga F que aún no ha acogido en su campo principal un partido de chicas). Y mientras, el Barça, pese a su ruina, hace de Bonmatí la futbolista mejor pagada del mundo
La caída en picado del Atlético de Madrid
La suspensión de los conciertos programados hasta abril en el Santiago Bernabéu, más allá del disgusto de perderse las actuaciones de Aitana (Ocaña no Bonmatí), sirvió para recordar que el Real Madrid no tiene licencia municipal para organizar en su estadio otro evento que ... no sea deportivo. Y, sin embargo, por ahí han pasado ya Taylor Swift y Karol G, que son cantantes, y en cambio Athenea del Castillo, Olga Carmona o Misa Rodríguez, que son deportistas y parte de la casa, no han podido aún jugar ahí. Curiosa paradoja que se explica en el negocio (es evidente que los ingresos que generan unas son impensables con las otras), pero también en el desprecio a la sección. Aitana por delante de Athenea.
Llama la atención la reticencia del club blanco a que su equipo femenino de fútbol juegue en Chamartín. ¿No es un estadio concebido primordialmente para jugar al fútbol? Si un partido de fútbol femenino de Primera División es un evento deportivo, si no hay incidentes en gradas y aledaños, si los aficionados lo piden y además es una sección más del club, ¿por qué de momento no se ha celebrado ningún partido en el Santiago Bernabéu tras cuatro años de estar creado el Real Madrid Femenino?
Dicen, y es verdad, que el femenino no genera demasiada expectación entre los socios del club blanco. Pero edesde mi experiencia creo que el estadio registraría una excepcional entrada si se animara a acoger uno de sus partidos importantes. Y sería una fuente de ingresos que ayudaría a paliar el déficit que el equipo femenino genera en las cuentas del club. El Real Madrid tiene miedo a que el campo parezca un solar y que el rival elegido, que tendría que cumplir las expectativas deportivas (o sea, el Barça), les propinara una severa derrota.
El día ideal como el primero de la historia, y así salir de dudas y sacudirse el vértigo, habría sido el próximo partido de vuelta de la fase previa de la Champions femenina frente al Sporting de Lisboa, un equipo con nombre, pero lejos de las blancas desde el punto deportivo. Si pierden en Lisboa, sería la primera remontada; si ganan, una fiesta para todos.
El Real Madrid es el único club de la Liga F que no ha abierto nunca a su equipo femenino las puertas de su estadio principal, en el que juega el masculino. Referentes mundiales como el Camp Nou en Barcelona, San Mamés en Bilbao, o el Vicente Calderón y el Metropolitano en Madrid se abrieron alguna vez, y con bastante éxito, para ver a las chicas. Todos. El Eibar y el Depor van más lejos, comparten sus instalaciones siempre entre femenino y masculino. Y estadios referentes en sus ciudades como el Heliodoro Rodríguez en Tenerife o el Colombino en Huelva han dejado sus campos a sus vecinos Costa Adeje Tenerife o Sporting de Huelva.
Athenea, madridista de pro y jugadora de la selección, declaraba hace poco sin perder la esperanza: «Jugar en el Bernabéu es un sueño que tengo desde niña. Espero que se cumpla y cuanto antes mejor». Quizás de ser cantante lo habría logrado ya. Los conciertos de Aitana se han reprogramado para junio.
La Aitana futbolista tampoco ha jugado aún en el Bernabéu. Pero sí en el Camp Nou, donde la cubren de oro. Pese a la ruina de la institución -según cuentan sus números y los de la Liga, aunque presuma de que la sección femenina no es deficitaria-, Joan Laporta convirtió ayer a la dos veces ganadora del Balón de Oro en la futbolista mejor pagada del mundo. Cumplía contrato en junio de 2025 y se lo ha renovado hasta 2028 por dos millones de euros. ¿Semejante inversión se traducirá en retorno? Esa es la duda. Quizás le pasé como cuando sus derroches con la masculina en los tiempos de Messi.
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