El Madrid castiga al colista y abraza el liderato

Aprovechó Mateo la visita del colista para aplicar rotaciones, descanso para Tavares y titularidades para Hugo González e Ibaka. Poco importó, tan amplio el abanico ofensivo de los blancos que no necesitan de la presencia de todas sus estrellas para triunfar. Musa e Ibaka, con una facilidad pasmosa, destrozaban la débil defensa gallega y, en el ecuador del primer cuarto, la ventaja ya era jugosa, de 12 puntos. Solo la presencia del gigante Diagné y la dirección de Taylor, el mejor jugador de los visitantes, evitaban que el duelo mantuviese una mínima tensión, pero los locales estaban decididos a acabar con la resistencia lo antes posible (29-12).

Garuba y Ndiaye dotaron de alta intensidad a la defensa blanca, un escudo impenetrable salvo por los triples de Aleix Font, el más implicado de los gallegos. Sin embargo, era Ibaka el absoluto protagonista, autor de mates, tapones y triples, combinación que antaño le convirtió en uno de los interiores más cotizados de la NBA. A la fiesta del congoleño se unió Hezonja, que con un triple desató las sonrisas de todo en banquillo local, palpable el buen ambiente en su vestuario. Se divierte, gana y cada semana se permite ser más ambicioso. El Madrid ha vuelto y el Leyma lo sufría con resignación al descanso (46-30).

Noticia Relacionada

Alocén, un fenómeno perseguido por la brutalidad de las lesiones

Pablo Lodeiro Fernández

El base, que estaba al alza en el Gran Canaria, se rompe el ligamento cruzado de la rodilla derecha, misma lesión que sufrió hace tres años en la izquierda

El hambre de los locales se mantuvo intacta tras la reanudación, muy buenos minutos del canterano González, un jugador que flojea en la anotación pero que es de sobresaliente en todos los demás apartados, contagiosas su hiperactividad y categoría defensiva. Hezonja, por su parte, parecía un adulto contra niños, se lucía el croata y cada acción con su firma era más espectacular que la anterior. No había noticias de un Coruña que ya había bajado los brazos salvo por un espectacular pase de Huskic por la espalda que acabó en una fácil bandeja para Burjanadze (69-51).

Los triples gallegos, obra de Thompkins y Jakovics, redujeron la diferencia a solo 11 puntos en los minutos iniciales del último acto. Fue necesario un pequeño tirón de oreja de Mateo en forma de tiempo muerto, pero la victoria local nunca peligró. Ibaka y Hezonja volvieron a pisar el acelerador y, esta vez sí, su superioridad fue definitiva.