EL Madrid amenaza con explotar: nunca había estado tan mal en la Euroliga

Los números son muy crudos. El Madrid es ahora tercero en liga con seis victorias en nueve partidos, su peor inicio en 16 años (en la 2008-09 perdieron cuatro, uno más), mientras que en el plano continental, nunca se habían visto en una situación tan adversa: son decimosegundos con un récord de seis triunfos y siete tropiezos, fuera de los puestos de playoffs y de los de repesca, algo que jamás se había presenciado desde la creación de la Euroliga en el 2000.

Pero la estadística más sangrante surge cuando se desplaza, pues solo ha vencido en un enfrentamiento a domicilio de los 11 que ha disputado. Fue, eso sí, ante el Barcelona el pasado 28 de noviembre, y el Madrid necesitó de dos prórrogas para tumbar a sus archienemigos. Mañana (20.45 horas, Movistar Plus), recibe en el WiZink al Fenerbahçe turco, segundo en la clasificación y que está dirigido por Saras Jasikevicius, leyenda y exentrenador azulgrana. El desafío parece gigante para un grupo que tiene fisuras por todas partes.

Por desgracia, los problemas blancos son de sobra conocidos. Solo cuando Campazzo está en pista, y a veces Tavares, el Madrid aspira a ser un grupo competitivo. El mejor ejemplo de ello fue el tercer cuarto ante el Asvel, donde el base argentino dio siete asistencias casi de manera consecutiva y provocó que los suyos firmasen un espectacular parcial de 8-23. Pero, cuando Mateo le sentó, los galos se envalentonaron, remontaron una desventaja de siete tantos y acabaron rematando la faena con la bella obra de arte de Lee.

Noticia Relacionada

La Final Four de la Euroliga deja Europa y se jugará en Abu Dabi en 2025

ABC

Solo el Real Madrid y el Olympiacos griego votaron en contra de trasladar la cita lejos del Viejo Continente por primera vez

Ese cuarto final en Lyon, en el que los pupilos de Mateo solo anotaron un tiro de campo en sus primeros siete minutos, también evidencia que cerrar los partidos no es una de sus especialidades esta campaña. De hecho, en los últimos periodos de sus seis derrotas continentales como visitantes, el parcial ha sido de 152 puntos encajados y solo 93 anotados.

Los fichajes (Ibaka, Rathan-Mayes, Feliz, Garuba) no funcionan, a los veteranos (Sergio Rodríguez, Rudy) se les añora, las lesiones se han cebado con todas y cada una de las posiciones y el calendario es cada vez más asfixiante, con hasta tres duelos por semana. Pero con esos males compiten todos los escudos de la élite europea, o eso es lo que se pudo extraer del discurso de Mateo en las horas previas al duelo ante el Fenerbahçe.

«Tenemos y necesitamos avanzar haciendo las cosas más de continuo en los momentos buenos y en los no tan buenos, apretar los dientes y ser mucho más sólidos. Es algo que buscamos desde el principio y necesitamos conseguirlo ya», aseguró el madrileño. «Estamos en un tramo de la temporada en el que tenemos que coger una buena posición. Ahora mismo, nos encontramos fuera de los playoffs y está claro que estamos dando un paso adelante y uno atrás».

Aprieta en sus exigencias el técnico, un hombre que consiguió crear un equipo campeón a base de ser positivo. Sin embargo, su figura parece tocada tras tanta derrota e, incluso, llamadas de atención de sus propios jugadores. Hace casi dos meses, el 13 de octubre y en el descanso del duelo ante el Bilbao, Hezonja cargó contra el plan de rotaciones de su entrenador. Poco después, Rathan-Mayes, aunque de manera más discreta, mediante sus redes sociales, pareció reprocharle a Mateo su poco minutaje.

Son algunas las voces que apuntan a Sergio Scariolo como posible sustituto. No tiene equipo desde la campaña pasada pero mantiene su puesto como seleccionador español, un cargo que parece imposible que pueda compaginar con el de dirigir a un transatlántico en pleno hundimiento.