1906, el año que Picasso 'inventó' el arte moderno
El museo cierra la programación del 50 aniversario de la muerte del artista con una muestra en el Reina Sofía de una etapa clave en su vida y su obra
Una exposición en el Reina Sofía saca del armario al Picasso homoerótico
![Una mujer pasa ante el 'Retrato de Gertrude Stein' y un 'Autorretrato' de Picasso](https://s1.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2023/11/13/1474045475_xoptimizadax-RKD6V2lobgPeI3DwF15Xy5H-1200x840@abc.jpg)
Si metiéramos en una batidora al Greco, Ingres, Corot, Cézanne, Gauguin...; el arte primitivo, egipcio, griego, etrusco, mesopotámico, íbero, románico catalán, polinesio, negro...; Gertrude Stein, Fernande Oliver, Josep Fontdevila... saldría alguna de las obras realizadas por Picasso en 1906. Hasta ahora se ... atribuía a Gósol, la localidad del Pirineo leridano adonde el artista acudió con su entonces musa-amante Fernande Olivier a finales de mayo de 1906, ser el 'laboratorio' de experimentación donde creó un nuevo lenguaje que abrió las puertas del arte moderno. La pareja regresó repentinamente a París (al Bateau Lavoir, en el bohemio Montmartre) a mediados de agosto, debido a un brote de fiebres tifoideas.
![El comisario de la exposición, Eugenio Carmona, junto a 'Desnudo con manos juntas' (MoMA, Nueva York)](https://s3.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2023/11/13/1474045484_xoptimizadax-U30487503485GqH-624x350@abc.jpg)
Pero una exposición en el Reina Sofía establece que 1906 (estancia en París, viaje a Gósol y regreso a París) fue el año del gran giro, del punto de inflexión en la vida y la obra del artista malagueño: no fue un epílogo del periodo rosa ni un prólogo de 'Las Señoritas de Aviñón', sino la primera aportación de Picasso a la noción plena de arte moderno. El atracón que ha conmemorado el 50 aniversario de la muerte de Picasso (sigue en plena forma: su obra 'La mujer con reloj' ha sido vendida estos días por 139,3 millones de dólares) se cierra en la pinacoteca madrileña con 'Picasso 1906. La gran transformación', una 'delicatessen', que ha contado con la colaboración del Museo Picasso de París y que, tras la inauguración hoy por parte de los Reyes, podrá visitarse del 15 de noviembre al 4 de marzo de 2024 en la segunda planta del edificio Sabatini.
El comisario, Eugenio Carmona, plantea su tesis a lo largo de ocho salas y más de 120 obras, con préstamos excepcionales de museos y colecciones de Europa y Estados Unidos. Da buena idea de la excelencia de las piezas el hecho de que el valor económico de las 84 obras cubiertas por la garantía del Estado supera los 942 millones de euros. Cuelgan en la muestra obras maestras como 'Desnudo con manos juntas' y 'Mujer peinándose' (MoMA, Nueva York), el 'Retrato de Gertrude Stein' (Metropolitan Museum, Nueva York), 'Los dos hermanos' y 'Autorretrato' (Museo Picasso de París), 'Los adolescentes' (L'Orangerie de París)... Muchos quilates.
![En primer plano, dos efebos (uno dionisiaco, otro apolíneo), de los siglos I y II d. C., del Museo Arqueológico y Etnográfico de Córdoba](https://s3.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2023/11/13/1474045430_xoptimizadax-U84624057608NuE-624x350@abc.jpg)
Pero la tesis de la muestra quedó diluida en la presentación a la prensa por las declaraciones del propio comisario en torno al Picasso homoerótico que saca del armario en este proyecto. Sorprendente, si tenemos en cuenta la homofobia y misoginia que tiñen hoy cualquier proyecto en torno a Picasso. Ya en una entrevista con ABC en mayo, Carmona explicaba que «es posible releer a Picasso desde la mirada 'queer'».
Habla el comisario de género fluido en el trabajo de Picasso, ya desde su etapa azul, donde retrata a personajes homosexuales de Montmartre: «Picasso convierte figuras masculinas en femeninas y figuras femeninas en masculinas». Decía Apollinaire que los arlequines picassianos «no son ni hombres ni mujeres». Algunas pinturas de Picasso en 1905 –prosigue Carmona– «pueden parecernos hoy, efectivamente, de sensibilidad gay. Algunos de sus desnudos de adolescentes de 1906 pueden parecernos hoy, efectivamente, homoeróticos. La diferencia –sustancial– estriba en que los primeros van a acentuar la melancolía decadente como valor y los segundos proyectan su performatividad de género como exaltación de la vitalidad y del renacer».
!['La mujer de los panes', de Picasso, y la Virgen de Gósol, en una sala de la exposición](https://s2.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2023/11/13/1474045432_xoptimizadax-U70276732733Sep-624x350@abc.jpg)
A través de Picasso, subraya el comisario, se reconoce «la importancia de los creadores e intelectuales homosexuales en la formación de la primera plena modernidad artística. La alteridad jugó un rol esencial». Es el caso de Max Jacob y Gertrude Stein, judíos y homosexuales. «Picasso no habría sido Picasso sin ellos –advierte Carmona–. Sin la impronta de su relación abierta con la homosexualidad, la primera definición del arte moderno en Picasso no habría sido como fue».
Pero no es una teoría propia ni nueva. Ya hablaron de ello en los 90 Cristoph von Tavel, Robert Lubar –el primero en asociar el término y el concepto académico 'queer' con la obra de Picasso–, Robert Rosenblum –relacionó a los jóvenes de Picasso en Gósol con la fotografía homoerótica de Wilhelm von Glœden–, o Margaret Werth –comenzó a hablar de algo parecido a la performatividad de género en la relación entre cuerpo y desnudo en el Picasso de 1906–.
!['Los adolescentes', de Picasso. Museo de l'Orangerie, París](https://s3.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2023/11/13/1474045380_xoptimizadax_20231113194337-U77310105548rUX-624x1050@abc.jpg)
La muestra arranca con el cuerpo como lugar de experimentación. En 1906, Picasso pinta 450 desnudos masculinos y femeninos. En ellos prima la poética del cuerpo. Contrastan con algunos anteriores que se exhiben en la primera sala: uno clásico de 1896 o los que aparecen en la 'Suite de los saltimbanquis', de 1905. De 1906 destacan 'Desnudo con manos juntas', del que Gertrude Stein nunca se deshizo; 'Los dos hermanos' –pintura que ha planteado dudas de género–, 'Los adolescentes'... Cuadros donde «ya aparece la integración fondo-figura del cubismo», dice el comisario.
Junto a ellos, dos efebos (uno dionisiaco, otro apolíneo), de los siglos I y II d. C., del Museo Arqueológico y Etnográfico de Córdoba; fotografías homoeróticas de Wilhelm van Gloeden e imágenes etnográficas, un Kylix (copa) del 490-480 a.C.; un 'San Sebastián', del Greco; 'Las grandes bañistas', de Cézanne... Picasso fue una esponja y 'se apropió' de todo lo que le interesaba. Tras pasar por su cabeza, siempre nacía algo nuevo. Junto a una máscara egipcia, 'Busto de mujer joven', obra incautada a Jaime Botín, hoy en la colección del Reina Sofía. No faltan las damas oferentes del Cerro de los Santos (Albacete), de las que hablaba Azorín, o las máscaras Fang (arte negro), como la que tenía Vlaminck y vendió a Derain.
!['Los dos hermanos', de Picasso. Museo Picasso, París](https://s3.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2023/11/13/1474045431_xoptimizadax_20231113194535-U74374117737uyY-624x950@abc.jpg)
El comisario incide en términos como hibridación y transculturalidad al hablar del Picasso de 1906: andaluz de nacimiento, emigra a Barcelona y se catalaniza (firmó algunas cartas como 'el Paul de Gósol'), se marcha a París en 1900, regresa a Barcelona en 1906 para presentar a Fernande a su familia... Y en lo vernacular, representado por Gósol, donde busca nuevas direcciones artísticas y se acerca al cubismo. Hay una sala dedicada a la localidad leridana, donde Picasso se hace mayor. Allí, recupera a las musas perdidas. Fue muy prolífico. En el centro de la sala, la Virgen de Gósol, talla románica del siglo XII, procedente de la iglesia de Santa María del Castillo y hoy en la colección del MNAC. En las paredes, la célebre 'Mujer de los panes' y retratos de Josep Fontdevila, un anciano contrabandista, propietario de la posada donde se instalaron Picasso y Fernande, Cal Tampanada, y al que retrató desnudo. Fue una extraña pero intensa fuente de inspiración para el artista. También se exhibe el 'Carnet catalán'. En Gósol pinta 'El harén', presente en la muestra, que remite a Ingres, Corot... «Una ensoñación masculina», según Carmona.
Dos mujeres son protagonistas en la vida de Picasso en 1906 y en la exposición. Por un lado, Fernande Olivier, 'la belle Fernande', el primer amor de Picasso. El romance comenzó en verano de 1904. Por entonces, Picasso estaba con Madeleine y Fernande con Joaquín Suñer. Pelirroja, de ojos verdes, culta, quería ser pintora. Abandonó a su marido, que la maltrataba. Daba clases de francés a los amigos norteamericanos de Picasso. Su obsesión, los perfumes. Su verdadero nombre era Amélie Lang. Nació en 1881 y murió en 1966. Estuvieron juntos de 1904 a 1912. No faltó el amor, ni los celos, ni el opio. Cuelgan retratos al óleo y esculturas. Una exquisitez, 'Bois de Gósol', en madera de boj, que Picasso talló con un cuchillo. Semeja el mascarón de proa de un barco.
![Detalle de la cabeza de Gertrude Stein, en el retrato que le hizo Picasso. Metropolitan Museum, Nueva York](https://s1.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2023/11/13/gertrude_20231113194134-U01757405126PMU-624x350@abc.jpg)
Por otro, Gertrude Stein, escritora, coleccionista, mecenas. Andrógina, lesbiana (vivía con Alice B. Toklas), era pequeña de estatura (1,55 metros), pero fornida, fuerte como un roble. Ella y su hermano Leo fueron los primeros coleccionistas importantes de Picasso. Su arrasadora personalidad y su aspecto fascinaban al artista. Ambos tenían miradas implacables. Gertrude posó para su retrato al menos noventa sesiones. La cabeza le dio al artista muchos problemas. Tras meses de lucha incesante, derrotado, Picasso la borró. En Gósol encontró la clave y terminó el cuadro a su regreso a París en 1906. «Logrará parecerse a su retrato», vaticinó Picasso. Y así fue. Un cuadro de una salvaje intensidad, cuyo rostro es una máscara, semejante a la del autorretrato de Picasso que cuelga junto a él.
En 1907, Picasso pinta 'Las Señoritas de Aviñón', «la pintura más innovadora de la Historia del Arte desde Giotto y primera obra maestra del siglo XX», según John Richardson, su gran biógrafo. Aunque Eugenio Carmona cree que «se ha exagerado su papel en la modernidad». En su opinión, esta obra supuso «un retorno al orden». ¿Será por polémicas?
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