Anna Kadabra, el fenómeno de la literatura infantil española que ha hechizado a un millón de lectores
Pedro Mañas y David Sierra son el tándem creativo de esta serie, cuyo éxito ha traspasado nuestras fronteras y ha llegado a 17 países
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![Portada del último título de Anna Kadabra, 'Brujos en pañales'](https://s2.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2023/11/13/portada_anna-kadabra-12-brujos-en-panales_pedro-manas-RhXCMZxo6GSHD1taSfntAwM-1200x840@abc.jpg)
Que una serie de literatura infantil de factura española se convierta en un fenómeno no ocurre todos los días. Que además supere el millón de ejemplares vendidos mucho menos. Por eso la librería madrileña Kirikú y la Bruja acogió este lunes un desayuno ... informativo con Pedro Mañas y David Sierra, el tándem creador detrás de la saga de Anna Kadabra. Dirigida a niños a partir de 6 años, la colección ya ha traspasado incluso nuestras fronteras y está presente en 17 países (el último, Bulgaria).
«Esta serie no para de darnos alegrías», comenzó Ana Casals, directora del sello Destino Infantil y Juvenil, que reconoció que alcanzar estas cifras dentro del género en nuestro país es complicado. Y más teniendo en cuenta que el primer título de Anna Kadabra (ahora va por el número 12, 'Brujos en pañales') llegó a las librerías apenas un mes antes del confinamiento. Sin embargo, lo que a primera vista parecía una desventaja comenzó a remar a favor. «Tras un par de presentaciones que pudimos hacer antes del cierre, nos empezaron a llegar buenas noticias. Algunos niños se estaban aficionando a la lectura gracias a la colección, quizá porque en ese momento necesitábamos más que nunca hacer eso que hace la literatura que es creer que lo que lo imposible se puede hacer posible. Poder viajar y vivir mundos fantásticos sin salir de casa«, explica Mañas.
Fenómeno fan
De acuerdo con Sierra, ese boca a boca se fue apuntalando a través de «una comunicación muy fluida que logramos establecer con nuestros seguidores«. Tres años más tarde, Anna Kadabra, nacida con el objetivo de subvertir el arquetipo de que las brujas son malas del cuento, ha desarrollado hasta su propio fenómeno fan. Así lo atestiguan las largas colas que se forman en las firmas de ejemplares, el hecho de encontrarse cada vez más pequeños disfrazados de sus personajes en Halloween o Carnaval, y que cuente hasta con seguidores adultos sin hijos.
Después de darle muchas vueltas, Mañas, premio Cervantes Chico 2023, cifró en tres las claves del éxito de la serie. En primer lugar, la particular voz de Anna Kadabra: «Es descarada, gamberra, muy actual, siempre está dudando el mundo de los adultos e implicando a los lectores. Eso ha hecho que conectara con el público infantil». «Los niños suelen decirnos que parece que sea una de sus amigas. Les resulta muy, muy cercana. Es la que arrastra al resto de la pandilla del Club de la Luna Llena«, remacha el ilustrador.
Además están los animales: «Ese amor entre niños y mascotas y esa posibilidad de que algún día a un niño se le aparezca un animal que viene a anunciarle que le ha elegido como brujo«, indicó el escritor, que señaló que esa es precisamente la tercera clave. Al indudable tirón de la magia se une el hecho de que en la serie está organizada por colores, de manera sencilla y enfocada en ellos: «Les hace escapar como a nosotros, pero si además piensan que hay una magia para ellos, que no es la de todos los demás, les resulta tremendamente sugerente«.
A todo ello hay que añadir las ilustraciones. El color asociado a unos rasgos muy característicos dibujados con trazos sencillos sirven en bandeja que los pequeños se reconozcan en ellos enseguida. «Saben rápidamente cuál es su personaje favorito. A los niños son cosas que les enganchan, pero al mismo tiempo les estás contando una historia más compleja y rica narrativamente.
Evolución y 'Spin off'
En todo este tiempo, la serie ha ido evolucionando y ya cuenta con un 'spin off', 'Marcos Potus'. «Desde la editorial, cuando vemos que una colección llega a tanta gente siempre nos preguntamos: »¿Hay alguna parte de este segmento de infantil a la que no hemos llegado?« Aunque Anna Kadabra es una serie con protagonista femenina, pero coral, y está concebida tanto para niños como para niñas, sí es verdad que igual algunos niños, algunos porque muchos leen la serie, pues tenían esa pequeña barrera«, aclaró Casals. »Más bien son los padres, hablo de varones, los que muchas veces previenen a los niños antes de que se acerquen a un libro con protagonista femenina«, matizó Mañas.
De ahí que fuera el mejor amigo de la pequeña bruja el que dio nombre a esta rama de la saga, aunque no fue el único motivo. «Marcus Potus contrasta mucho con Anna Kadabra. Ella es una urbanita recalcitrante, a él le encanta el campo; él tiene magia verde y ella, arcoíris; ella es una cínica pesimista, él, un optimista, pasional y presumido. Nos lanzamos no solo porque podría traer a niños a la colección, sino sobre todo porque ambas colecciones podrían ser un puente mutuo para que para superar un poco esas barreras que algunos tienen todavía«, especificó el escritor. »De hecho, las dos están avanzando y fundiéndose porque las aventuras son comunes. Lo que cuentan no se diferencia, igual es algo que la hace también tan universal y transversal«, corroboró el ilustrador.
A través de todos los títulos (también en las ediciones especiales de las 'Aventuras legendarias', la segunda de las cuales, 'La canción de los dragones', se publica en dos semanas), Anna se perfila como un personaje con muchas aristas que se plantea cuestiones como la inseguridad, la amistad o la identidad. No obstante, los autores confiesan que han tenido que adaptarse a la sensibilidad de cierta parte de su público y evitar palabras que puedan ofender de manera muy obvia, como imbécil o idiota. Sin embargo, aseguran que no se trata de una autocensura, sino de una convicción propia de no hacer gamberradas que ofendan personalmente a los personajes, que critiquen cuerpos ajenos o que discriminen por género.«Yo he sufrido ese tipo de acoso de niño. Por eso no vemos la necesidad de dar herramientas en nuestros libros para que eso se perpetúe. Creo que es mejor mostrarles una realidad, perfectamente posible, en la que ese tipo de gamberradas hechas con con intención de herir a alguien no ocurran sencillamente porque nadie lo ve necesario«.
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