La Federación de Asociaciones Protectoras de Animales de Madrid asegura que el Ayuntamiento de Cobeña permite abatir perros asilvestrados. El Consistorio lo niega.
El galgo murió dos horas después de ser tiroteado
La Federación de Asociaciones Protectoras de Animales de Madrid (Fapam) aseguró hace unos días que el Ayuntamiento de Cobeña permitía a los cazadores abatir perros asilvestrados. Y que, por ello, un galgo fue tiroteado en la localidad cuando paseaba a escasos metros de su dueño.
El Ayuntamiento de Cobeña ha aclarado hoy que el incidente se produjo el 18 de julio durante un descaste de liebres y conejos que realizaba un grupo de cazadores previa autorización de la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid. El Consistorio subraya que carece de competencia para expedir tales poderes.
El propietario del galgo interpuso de inmediato una denuncia ante la Guardia Civil. El can, que contaba con su microchip y su cartilla de vacunación al día, falleció dos horas después en una clínica veterinaria. Todos estos datos han sido facilitados por Fapam, que explicó en un comunicado recogido por Europa Press como de acuerdo con la Orden 1942/2010, las licencias emitidas por Ayuntamiento de Cobeña eran «ilegales».
«Resulta ilógico e necesario, pues estos animales vagan por los alrededores porque han sido abandonados por unos propietarios sin escrúpulos», afirmaba Maite Cubillo, presidenta de la plataforma. Cubillo aludió a otros modos mejores de captura, como las jaulas trampa o los rifles de dardos anestésicos con que cuentan las protectoras. El Ayuntamiento de Cobeña dispone de instalaciones para el acogimiento temporal de perros y gatos, acordes con la Ley 1/90 de Protección Animal de la Comunidad de Madrid. Así como con toda la regulación pertinente en materia del cuidado de animales.
«Este tipo de permisos sólo prolongan la temporada de caza: sirven para que los cazadores practiquen su afición a disparar», comentó Cubillo. Desde el Ayuntamiento de Cobeña consideran que la presidenta de Fapam realizó estas declaraciones sin disponer de la información adecuada.