Los portugueses desilusionados salen a la calle para pedir la dimisión de su Gobierno

Pedir la dimisión del Gobierno y la salida de la troika de Portugal son los dos objetivos de la manifestación que se celebra este sábado en 40 ciudades lusas y del extranjero. «Que se lixe a troika» (traducido al español diríamos que se fastidie la troika, o un poco más agresivo, que se jo… la troika) es una asamblea de 120 activistas que organizan esta protesta que tiene como lema «El pueblo es quien ordena». Esperan poder volver a juntar a medio millón de personas en Lisboa, como ocurrió en la manifestación del 15 de septiembre. «No somos ni un movimiento ni una plataforma, sino que somos activistas, cada uno con sus ideas, y queremos hacer cosas en común», explica Nuno Ramos de Almeida. En esta ocasión, esperan una manifestación gigante que demuestre la desilusión y la revuelta de la sociedad portuguesa.

«El salario del mes de febrero ha sido la mejor convocatoria del Gobierno para esta manifestación», comentan Joana, João, Nuno y Lucía, cuatro de los activistas que han optado por no tener portavoces, se van turnando. Hacen referencia al corte extraordinario del 3,5% que están sufriendo todos los portugueses (excepto los que reciben el sueldo mínimo) en sus salarios de este año. Sienten que la sociedad portuguesa está descontenta con su Gobierno, «elegido con un programa que no ha cumplido en absoluto». Creen que ahora hay más conciencia entre los portugueses de la necesidad de que exista una alternativa en la vida política del país. «Queremos que cada uno traiga su reivindicación y también su esperanza». No están preocupados por el número de participantes, ni por conseguir más adhesión que hace seis meses. Lo importante es que en este espacio de tiempo «logremos dos grandes manifestaciones, algo que no se logra por casualidad».

No esperan violencia, porque «es una manifestación de familias» y porque no es lo que buscan. Eso sí, avisan de que hay personas en verdadera situación de desesperación y si asistimos a situaciones violentas «el Gobierno será el único responsable». Y como alternativa, piden una propuesta que cumpla y haga cumplir la Constitución, que es de por sí «el mayor proyecto político».

Varios movimientos ya han anunciado su participación en esta protesta, entre ellos la Plataforma 15 de octubre, la central sindical y los militares. Además se juntarán a la marcha varias «mareas», la de educación, sanidad y jubilados, que a su vez es un conglomerado de sindicatos, profesores, médicos, usuarios... «La idea de las mareas simbolizan ríos que convergen en una misma protesta». Saldrán a las cuatro de la tarde de Marqués de Pombal y se dirigirán a la plaza de Terreiro do Paço. No obstante, a partir de las dos de la tarde, intentarán «tener un atelier para confeccionar los carteles de aquellas personas que no saben o no tienen medios para hacerlo». Y por otro lado, aunque no están relacionados, el movimiento «Cerco al parlamento», ha convocado otra propuesta para esta tarde, a las tres, frente a la Asamblea de la República.