Suscríbete a
ABC Premium

El ímpetu económico de madrid

Gracias a esa impagable aportación periódica que procede de los trabajos de

Gracias a esa impagable aportación periódica que procede de los trabajos de Julio Alcaide Inchausti y Pablo Alcaide Guindo, autores del artículo «Datos provisionales de la evolución de los agregados en 2006 y avance del Balance Económico Regional de los años 2000 a 2006», publicado en «Cuadernos de Información Económica», enero-febrero 2007, el mayor crecimiento de todas las autonomías en el año 2006 corresponde a Madrid con un aumento del 4,19% del PIB a precios básicos, sobre una media española del 3,73%. Como corolario, en Madrid creció la población ocupada, durante 2006, un 4,10%, el desempleo disminuyó un 1,90 y la productividad aumentó un 2,15%. La convergencia de Madrid con la UE de los 15 fue en el 2006 la más alta de España, el 121,26%. Según los estudios estadísticos de la Comunidad, algunos municipios -en cabeza, Pozuelo de Alarcón y Las Rozas de Madrid- tienen unas cifras altísimas en este sentido, esto es, pertenecen ya a la Europa opulenta. Finalmente, el centro de gravedad de la economía española en 2005, se sitúa en Sacedón (Cuenca), con una «tendencia constante a acercarse a Madrid» en el periodo 2000-2005.

En ese imprescindible número de «Economistas», para entender por qué sucede lo anterior, correspondiente a abril de 2007, monográfico «Economía de Madrid: logros y perspectivas», el artículo de Juan E. Iranzo y Gregorio Izquierdo, «El aprovechamiento de las externalidades de red: Madrid y las TIC» es sintetizado así por sus autores: «Con el objetivo de mantener el crecimiento sostenido de la región, se está impulsando la implantación de una red de infraestructuras aumentando la eficiencia en la prestación del servicio y reforzando la situación competitiva de la comunidad en cuanto al sector tecnológico se refiere, favoreciendo el empleo y la actividad económica». Agréguese lo que indica el profesor García Delgado, en su aportación al citado número de «Economistas», titulada «A modo de epílogo: Madrid, capital económico internacional«: «Mientras que en bastantes autonomías se vive un proceso de introversión -de «ensimismamiento» se ha escrito-, reduciendo a esa escala, lo regional, los asuntos de cualquier índole y orden, Madrid ha acentuado su carácter extrovertido y cosmopolita, reafirmándose como capital y región internacionalizada», con el añadido de la desregulación, porque el profesor García Delgado subraya que «las tasas de empleo del Sector público -y esto a pesar de la capitalidad de la nación- han sido menores en Madrid que en el resto del país».

Durante la primera etapa de la Revolución Industrial, la del carbón, el ferrocarril y la producción textil, la capital económica de España fue Barcelona; durante la segunda, la de la automoción, la industria química y la electricidad, la capital fue, indudablemente, Bilbao; para la tercera, la de las TIC, la de la globalización económica y la actividad sin intervencionismos, es Madrid.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación