La Audiencia dice que el PCE(r) y los Grapo son una misma organización
El juez de la Audiencia Nacional Guillermo Ruiz Polanco cree que el PCE (r) -Partido Comunista Reconstituido- y los Grapo integran una misma estructura, en la que el partido se encarga de marcar las directrices políticas y las acciones terroristas a los «comandos», y estos las ejecutan. El juez decretó ayer prisión para los dos detenidos el lunes en Madrid tras interrogarlos.

MADRID. El titular del Juzgado de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional, Guillermo Ruiz Polanco, decretó ayer el ingreso en prisión de Carmen Muñoz y Leoncio Calcerrada, los dos detenidos el pasado lunes en el barrio madrileño de Vallecas -acusados de integración en organización terrorista y falsificación- en el marco de una operación coordinada por la propia Audiencia que ha permitido, en la última semana, la detención de 16 presuntos activistas de los Grapo en Madrid, Vitoria y París.
Las conclusiones de la investigación revelan una estructura jerarquizada en el PCE(r)-Grapo desde su nacimiento, en 1975, donde los componentes de la banda se nutren de las órdenes que marca el «comité central», que no es otro que la dirección del partido, según señalan fuentes jurídicas.
A diferencia de los miembros de ETA, los integrantes del aparato militar de los Grapo cuentan con una formación política elevada con el fin de que los activistas mantengan un mayor grado de compromiso con la organización terrorista. Así se desprende de los manuales incautados por la Guardia Civil a los Grapo, donde los textos, además de ofrecer a los activistas formación en técnicas de guerrilla, están impregnados de un fuerte contenido ideológico, según señalan las mismas fuentes.
La organización terrorista ha intentado a toda costa, desde la desarticulación de su cúpula en Alicante en 1977, mantener separados el aparato político del militar para evitar el desmantelamiento total de la estructura. Sin embargo, fuentes de la investigación señalan que, mientras en el caso de ETA, Batasuna actúa obedeciendo las directrices del aparato militar; en el de los Grapo la correlación es inversa, y el PCE(r) es el que se encarga de marcar los objetivos al brazo ejecutor.
Carmen Muñoz y Leoncio Calcerrada, los presuntos activistas que ayer ingresaron en prisión tras prestar declaración ante el juez, acusados por el fiscal de la Audiencia Nacional Enrique Molina de los delitos de integración en organización terrorista y falsificación de documento oficial, habrían desarrollado hasta su detención funciones de enlace entre las estructuras del llamado «comité central» y la célula terrorista de Madrid.
Objetivos: Policía y Benemérita
En este sentido, su labor habría consistido, según fuentes jurídicas, en adoctrinar y reclutar nuevos miembros para la banda y seleccionar objetivos, entre los que se encontraban policías, guardias civiles, furgones blindados y bingos, además de jueces y fiscales de la Audiencia Nacional. Los presuntos terroristas negaron ante el juez las acusaciones y aseguraron que el PCE(r) y los Grapo «no tienen nada que ver», señalaron las mismas fuentes.
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