Nace la Fundación Doménech Montaner al hilo de los 100 años del Palau
JUAN PEDRO YÁNIZBARCELONA. ¿Ha sido justa la posteridad con Doménech Montaner? Cuestión es ésta difícil de dilucidar. Para la Fundación que lleva su nombre y acaba de presentarse a la Prensa, no lo
JUAN PEDRO YÁNIZ
BARCELONA. ¿Ha sido justa la posteridad con Doménech Montaner? Cuestión es ésta difícil de dilucidar. Para la Fundación que lleva su nombre y acaba de presentarse a la Prensa, no lo suficiente, teniendo en cuenta que: el Instituto Pedro Mata, la Casa Navás, San Pablo, el Palacio Montaner, el de la Música, infinidad de monumentos funerarios y residencias por la Costa, las casas León Morera y Thomas y tantos otros monumentos, inolvidables, salieron de su estudio y todo el mundo ha elogiado su capacidad para movilizar todo un equipo auxiliar de artesanos: ceramistas, vidrieros ebanistas, mueblistas, herreros, yeseros y escultores famosos.
Aprovechar el centenario El centenario del Palau es una buena ocasión para el lanzamiento de la Fundación Doménech Montaner (FDM) y su presidente, Josep Grau -antiguo director del Hospital de la SC y SP-, en el acto de presentación consideró que «ha sufrido cierto olvido ante el reconocimiento universal de Gaudí». Otro peso fuerte de la comisión, surgida al calor del centenario del Palau, es Federico Mayor Zaragoza, exsecretario general de la Unesco, bajo cuyo mandato la obra de Doménech fue declarada «Patrimonio de la Humanidad» y, ahora, se pretende que sea considerada como paradigma del modernismo.
El pasado otoño, en el Centro Borges de Buenos Aires, tuvo lugar una gran exposición sobre Doménech, con fotos de la construcción de muchos de sus trabajos apenas conocidas.
En el campo académico, la FDM promueve un catálogo razonado de toda su obra constructiva, en colaboración de grandes instituciones docentes de Europa y América. Otra función será velar por el buen estado de conservación de todo el patrimonio del arquitecto que vivió entre 1850 y 1923.
El personaje fue, también, viajero, historiador y político; su obra fue tan ingente que sus días parecen tener más de 24 horas. Fue un gran restaurador.
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