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Sentandreu afirma que algún diputado más del PP se irá al Grupo Mixto antes de 2007

Francisco Camps tiene previsto advertir en la Junta Directiva Regional que no quiere más disputas internas y mucho menos dar imagen de fractura ante la sociedad

MANUEL CONEJOS

VALENCIA. La marcha de Francisco Javier Tomás Puchol del PP para constituir el grupo Mixto en las Cortes sigue acaparando gran parte de la atracción política autonómica. Ayer, el nuevo integrante de Coalición Valenciana acudió a la sede de la formación valencianista para ofrecer su visión de los hechos junto al presidente del partido, Juan García Sentandreu.

Tomás aseguró que ha actuado de forma «valiente», ya que lo «cobarde» hubiera sido seguir en el PP «apoyando con un botón» lo que consideraba como situaciones de corrupción dentro de la formación popular. El ex diputado del PP calificó su decisión como «reflexiva» y afirma que su marcha al grupo Mixto se aceleró por la situación que se ha creado en Castellón con el «caso Fabra».

Contactos desde febrero

El ex diputado del PP estuvo apoyado en todo momento por el presidente de Coalición Valenciana que fue quien llevó el peso de la comparecencia pública. García Sentandreu desveló que las negociaciones con Tomás «datan del pasado mes de febrero» y tuvieron ya una traslación pública con la presencia de Tomás en la fiesta de la valencianía el pasado 2 de octubre.

Sentandreu descartó que el pase de Tomás a la formación que preside se haya debido a que Fabra le dijera que no va a salir de cabeza de lista en L´Alcora. «Eso es falso», explicó el líder valencianista, quien dijo que esta explicación se debe a los intentos del PP por justificar «el clima irrespirable que hay en su partido».

García Sentandreu rechaza las acusaciones que se han vertido contra Coalición Valenciana en el sentido de que es un partido de extrema derecha y aseguró que «nada que tenga que ver con el pasado de los que dirigimos Coalición tiene que ver con el presente de esta formación foral, constitucionalista y valencianista».

En cuanto a la operación de captar a Francisco Javier Tomás, el líder valencianista dejó claro que «no pertenecía a ninguna «familia» del PP y garantizó que ha huido de cualquier disputa entre campistas y zaplanistas y ha buscado personas «libres e independientes».

El líder de Coalición centró sus críticas en el portavoz del Consell, Esteban González Pons, al que acusó de haber pactado con Joan Rigol (CiU), Josep Bargalló (conseller en cap de la Generalitat catalana) y Ernest Maragall el dictamen de la AVL que certificaba la unidad del valenciano y el catalán. «Ese monstruo de la AVL devorará la mayoría absoluta del PP», aseguró.

Poco liderazgo de Camps

También valoró el «poco liderazgo» que tiene Francisco Camps «que necesita acudir al fiscal a pedir ayuda. Al fiscal se acude para denunciar a los corruptos y no a los denunciantes de corrupción», explicó Sentandreu.

El presidente de Coalición Valenciana insistió en que mantiene más contactos con cargos del Partido Popular, entre ellos, algunos diputados autonómicos. «No duden ustedes que algún diputado más del PP se pasará al grupo Mixto antes de que acabe la legislatura», aseguró.

No obstante, Sentandreu quiso explicar que «nosotros sólo aceptaremos a gente que haya tenido un proceso como el de Tomás y nunca comprometeremos la gobernabilidad actual porque no la queremos». Explicó que «no queremos que nos regalen nada, sino que queremos conseguirlo presentándonos a las elecciones en 2007».

En cuanto a la primera intervención de Javier Tomás desde el grupo Mixto, Sentandreu manifestó que «me ha sorprendido que el Letrado Mayor de las Cortes no haya recibido aún el requerimiento notarial» y dejó entrever que puede haber algún intento de que Tomás no participe en el próximo Pleno del miércoles en las Cortes.

Ahora, que Coalición Valenciana tiene «voz» en el Parlamento autonómico se plantea conseguir «recortar» los presupuestos de 2006 para la AVL como objetivo prioritario.

Esta incómoda situación para los populares ha provocado una especie de «quiniela» de posibles nuevas deserciones que el portavoz popular en las Cortes, Serafín Castellano, negó ayer de forma tajante. Es más, Castellano aseguró que resulta «un poco pintoresco que un partido extraparlamentario ponga en duda la fortaleza de la primera gran fuerza política de la Comunidad Valenciana».

Los «nervios» de Tomás

Por su parte, el presidente provincial del PP de Valencia, Alfonso Rus, explicó que «en el PP somos muchos y el que no esté a gusto, es lógico que se vaya». Rus consideró que Tomás quizás «estaba nervioso por saber qué iba a hacer a partir de 2007».

Castellano y Rus dieron estas explicaciones al término de la presentación de los presupuestos del Consell para 2006 en la provincia de Valencia que ascienden a un total de 1.302 millones euros con inversiones principales en infraestructuras y servicios sociales.

El discurso del presidente regional

Ante esta situación de confusión generalizada, el presidente regional del PP-CV, Francisco Camps, tendrá hoy una dura papeleta en la Junta Directiva Regional que se celebrará en la capital del Turia y que él mismo clausurará. En esta intervención el dirigente popular pretende lanzar un mensaje duro contra la imagen de fractura interna que se ha trasladado a la sociedad en la última semana y hará un llamamiento al cierre de filas que, de no ser respetado, puede acabar con las primera decisiones drásticas, tanto en el Consell, como en el partido. Así pues, se presume aviso a navegantes.

En la «sensibilidad» zaplanista del partido se afronta esta Junta con una actitud expectante. No tomarán la iniciativa a la espera de ver si Camps afronta la crisis interna o si, según especulaban ayer algunos miembros de esta corriente, «prefiere hablar de la Ley Electoral». En cualquier caso, habrá que ver cuál es el intercambio de pareceres en el turno de ruegos y preguntas y si hay una autoevaluación de la situación del partido.

Esta tensa situación en el PP dio pie ayer a que la coordinadora de EU, Gloria Marcos, diera su versión de los hechos y explicó que el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, «no tiene motivos» para quejarse por la fuga de un diputado del PP al grupo Mixto y su afiliación a Coalición Valenciana «porque él es el principal inductor del crecimiento de la ultraderecha regionalista».

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