Cómo disminuir el calor para dormir bien en las noches de verano
Algunos trucos caseros del quiropráctico Ata Pouramini para poder dormir «frescos» por las noches

Dormir por las noches en verano a veces resulta muy complicado debido a las altas temperaturas. Siempre y cuando los termómetros estén por debajo de los 25 grados habrá una temperatura adecuada para conciliar el sueño, pero la climatología en España no siempre nos lo permite, y mucho menos en verano.
Es muy habitual que durante las noches de verano, el calor impida que se descanse de forma adecuada, y en muchas ocasiones hace que sea muy duro afrontar la rutina diaria.
Ata Pourmini, orientador en salud, experto en nutrición, quiropráctico y autor del libro «Tú eres tu medicina», aconseja seguir una serie de recomendaciones caseras para poder dormir de manera plácida incluso en los meses de verano.
1. En caso de dormir en una casa de dos plantas, es recomendable dormir en el piso de abajo. Se nota bastante la diferencia de temepratura.
2. Si es necesario hay que sacrificar la comodidad por el frescor. Hay que saber que el sofá cama retiene menos el calor porque normalmente se encuentra más bajo que la cama, e incluso a ras de suelo.
3. Es recomendable ducharse con agua fría antes de meterse en la cama, el hecho de acostarse con unos grados menos en el cuerpo, hará que la sensación de calor sea menor y tarde más en aparecer.
4. Un truco que hace que la temperatura del cuerpo baje inmediatamente es acostarse con unos calcetines mojados en los pies.
5. Si el calor se hace insoportable en plena noche y es imposible conciliar el sueño, es bueno moharse la nuca, las muñecas y las axilas.
6. Un plato de hielo cercano a un ventilador hace las veces de aire acondicionado casero y sus efectos duran unos 45 minutos, suficiente para que logremos conciliar el sueño.
7. Si tienes aire acondicionado, con lo que todo es más fácil, evita irte a la cama con el pelo mojado. Un resfriado es lo menos que puedes coger. Fuertes dolores de cabeza y cuello, lo más probable.
8. Es aconsejable dormir desnudo y lo más estirado posible. La postura fetal nos da más calor. ¡Felices sueños!
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