La discreta pero muy activa vida amorosa de las políticas francesas
A diferencia de Hollande, Sarkozy o Strauss-Khan, ellas saben proteger su intimidad con eficacia

Algunas políticas francesas tienen una vida sentimental tan intensa y variada como la de sus pares masculinos. Ellas, sin embargo, saben preservar su intimidad con mucha más eficacia que sus colegas, comenzando por el presidente de la República François Hollande (59 años), cuya relación con la actriz Julie Gayet (41) tiene sus antecedentes.
Mucho antes que Hollande abandonara el lecho conyugal de Ségolène Royal (60), madre de sus cuatro hijos, ella tuvo un acompañante que suscitó múltiples comentarios sobre su libertad sentimental. Ségolène puso fin a aquella historia antes de que se conociera la relación entre Hollande y Valérie Trierweiler (49). Presidenta de la región Poitou-Charantes, Royal había bromeado en varias ocasiones sobre una posible petición de matrimonio por parte del actual jefe del Estado, que nunca llegó a producirse. Sin embargo, son muchos otros los requerimientos matrimoniales desmenuzados por sus biógrafos; por ejemplo, el del actor Patrick Dewaere, quien se quitó la vida en 1982. Ségolène le rechazó. Y mucho más tarde, Royal decidió cortar por lo sano la insistencia de un hombre de negocios que también suspiraba por ella.
Tras la reciente ruptura de Hollande con Trierweiler , ahora Ségolène Royal espera que el padre de sus hijos le haga entrar en un nuevo gobierno. Pero tal ambición política sigue siendo incompatible con la siempre temible publicidad sobre su vida amorosa.
Preservar la libertad
Marine Le Pen (45) se casó en primeras nupcias con Frank Chauffroy, empresario y dirigente de extrema derecha. Tuvieron tres hijos. Una vez divorciada, volvió a contraer matrimonio con otro cabecilla del mismo espectro político, Éric Lorio, para volver a separarse por segunda vez. Luego siguió una larga temporada de alegre divorciada, con cierta vida nocturna. Hasta que encontró a un compañero estable en Louis Aliot, vicepresidente del FN, con el que sostiene una relación que ambos llevan con discreción precisamente para preservar, el uno y el otro, cierta libertad.
Divorciada y madre de cuatro hijos, Christiane Taubira (62), ministra de Justicia, es una mujer apasionada. Poco después de entrar en el gabinete de Hollande, se supo que su compañero sentimental ocupaba un alto cargo en el mismo ministerio. Taubira puso el grito en el cielo y salió al paso de las habladurías de un posible nombramiento favorecido por este romance. Y lanzó un aviso a quienes se interesaran por su vida amorosa: la legislación francesa le permite preservar su intimidad de manera implacable. No es secreto, sin embargo, que tuvo una vida sentimental activa antes y después de su divorcio.
Rachida Dati (48), quien también ocupó la cartera de Justicia con Nicolas Sarkozy, es madre soltera de una niña de 5 años, Zhora. Lleva tiempo querellándose con el presunto padre de la pequeña, un adinerado empresario llamado Dominique Desseigne . Este se resiste a reconocer una paternidad, a su modo de ver, dudosa. Dice que Dati tuvo otras relaciones antes y después de su aventura. La exministra jamás lo ha negado e incluso se le adjudica algún noviazgo con famoso incluido: el actor Vincent Lindon. Rachida prefiere preservar en secreto su vida sentimental como madre soltera, compatible con su situación de alcaldesa conservadora del distrito VII de París.
Aurélie Filippetti (40), ministra de Cultura, presume de ser una mujer libre y moderna. Madre de una adolescente de 17 años, quizá sea la única política francesa que se ha querellado contra su compañero sentimental, acusándole de violencia conyugal. Rota aquella relación, Filippetti publicó una novela con ciertos matices escandalosos, en los que relataba unas relaciones carnales, fuera del matrimonio, entre una joven con brillante futuro político y un hombre casado. Algunos críticos vieron en ello un relato con ribetes autobiográficos. La ministra tiene hoy una vida más estable junto a un empresario alejado del Partido Socialista, donde Filippetti llegó a ser cortejada por Dominique Strauss-Kahn (64). Pero ella le rechazó de manera enérgica.
Christine Lagarde (58), actual directora gerente del FMI y ex ministra de Economía y Finanzas (entre 2007 y 2011), estuvo casada con Wilfred Lagarde y tuvo dos hijos. Hasta que él o ella, o ambos, encontraron el amor en otro lecho. Roto el matrimonio, Lagarde comenzó un sólido noviazgo con el millonario marsellés Xavier Giocanti. Instalada en Washington D.C. y con una apretada agenda de trabajo, Lagarde, antigua nadadora de élite, no puede viajar a Marsella o París con la frecuencia que quisiera. El teléfono y la intensa vida social en la capital política de EE.UU, le permiten otras distracciones.
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