Sáenz de Santamaría, a Susana Díaz: «Su interlocutor es Juanma Moreno»

Los problemas de Susana Díaz en el Parlamento andaluz para ser investida presidenta de la Junta no inquietan lo más mínimo al Gobierno de Rajoy, que observa desde la distancia lo que ocurren con la candidata socialista a la reelección y rechaza su llamamiento para que Rajoy «cumpla su palabra» y permita que gobierne la lista más votada. «Su interlocutor es Juanma Moreno», ha subrayado a ABC la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, al término del Consejo de Ministros. [ Así hemos contado al minuto la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros ]

El Gobierno no se siente en absoluto responsable de la inestabilidad que está creando Susana Díaz en su Comunidad Autónoma, y que de momento no parece que se vaya a solucionar, tras ser rechazada su investidura este viernes en segunda votación .

Santamaría ha recordado que la presidenta andaluza en funciones decidió convocar las elecciones cuando no tocaba por los tiempos previstos, en aras de una supuesta estabilidad. «Quien toma estas decisiones debe valorar las consecuencias que pueden generar. Podía haber aguantado hasta el final de la legislatura, y no lo hizo. Cada uno tiene que ser consecuente con sus decisiones, sobre todo por sus decisiones personales», ha explicado la vicepresidenta.

Respecto a la posición que adopte finalmente el PP en el Parlamento andaluza, Santamaría ha insistido en que no le corresponde al Gobierno de la Nación valorarlo ni entrar en ello. Ya en los pasillos, Santamaría ha dejado claro que «el interlocutor» de Susana Díaz es el presidente del PP andaluz, Juanma Moreno, y nadie más. Descartaba así por completo un supuesto contacto entre el PSOE andaluz y el presidente del Gobierno para tratar de sellar un acuerdo.

La vicepresidenta también se ha referido a la reforma electoral que plantea ahora Susana Díaz, y que pasaría por imponer una segunda vuelta para que gobierne la lista más votada. Santamaría ha recordado que cuando el Gobierno defendió esa reforma, para los ayuntamientos, durante el verano pasado, no tuvo ningún compañero de viaje, y solo críticas de la oposición.