Bolinaga, doce meses «de humillación» a las víctimas

La Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), cuando se cumple un año desde que el etarra Jesús María Uribetxeberría Bolinaga abandonara la prisión, exigió su vuelta a la cárcel para seguir allí con el tratamiento que requiere y poner fin a estos doce meses «de humillación» vividos.

Bolinaga salió de prisión hace un año en régimen de libertad condicional por sufrir una enfermedad incurable. El juez central de Vigilancia Penitenciaria, José Luis Castro , decretó la libertad condicional de Bolinaga «por razones humanitarias y de dignidad personal», una decisión que confirmó trece días después la Audiencia Nacional contra el criterio de la Fiscalía y la médico forense, Carmen Baena , que defendía su tratamiento en prisión.

A su salida de prisión, la AVT colocó en su página web un «contador de la vergüenza» que ayer jueves alcanzó los 365 días desde que Bolinaga está en la cárcel «de manera injusta e incomprensible».

Para la asociación de víctimas, estos doce meses sólo han servido para comprobar «la humillación diaria que su libertad ha supuesto» para las víctimas y que, además, «nunca ha estado en fase terminal». «Se le ha regalado un año de libertad a este asesino cuando él no mostró la más mínima compasión con sus víctimas», denuncia.

La asociación presidida por Ángeles Pedraza reiteró así su exigencia de que Bolinaga vuelva a la cárcel, donde a su juicio «puede recibir perfectamente el tratamiento de su enfermedad», según recuerdan que ya sostuvo la forense de la Audiencia Nacional y refrendó después el Colegio de Médicos.

Desde que salió de la cárcel, Bolinaga fue recibido entre aplausos al llegar a su localidad, realiza «paseos» en los que ha tomado «vinos» o se ha negado a realizar un nuevo reconocimiento médico.