Margallo ofrece en Palestina la mediación de España en el conflicto con Israel

José Manuel García-Margallo ha ofrecido este lunes en Ramallah la mediación de España para ayudar a resolver el conflicto entre palestinos e israelíes, si las partes lo aceptan. El ministro de Asuntos Exteriores hizo este ofrecimiento tras reunirse con su colega palestino, Riad Al Malki, dentro de la gira que realiza por Oriente Próximo y que mañana le llevará a Jerusalén para entrevistarse con las autoridades israelíes.

La visita del ministro se produce en un momento en que el secretario de Estados Unidos, John Kerry, intensifica sus contactos con las dos partes, con el fin de lanzar una nueva iniciativa de paz. En el último mes y medio, Kerry se ha reunido con el presidente palestino, Mahmud Abbas, en seis ocasiones, la última ayer en Estambul. Además, para el 28 de abril está prevista un encuentro en Washington de dirigentes de Catar, Egipto, Jordania, Palestina y Marruecos para tratar del asunto, y un día después se verán con Kerry. «La situación –dijo Malki- se está moviendo a cierta velocidad».

García-Margallo, que el pasado sábado se había reunido con Abbas en Amman , y que hoy también se entrevistó con el primer ministro en funciones, Salam Fayyad, insistió en ofrecer la interlocución de España «de todo corazón» para tratar de que «Jerusalén sea una ciudad de paz».

Antes de llegar a Ramallah, el ministro había visitado, en Jericó, la Academia de Policía Civil de Palestina, donde la Guardia Civil imparte unos cursos de formación dirigidos a preparar a los agentes de tráfico palestinos, ya que las muertes por accidentes automovilísticos, son la principal causa de muerte en los Territorios.

Preguntado por los periodistas sobre la posibilidad de facilitar armas a los rebeldes sirios, como desean Francia o Reino Unido, García-Margallo dijo que España, junto a Alemania y otros países, no es partidaria de ello, porque mantiene su preocupación de que pudieran caer «en manos incorrectas», en referencia a fuerzas yi¡hadistas.

Finalmente, sobre la decisión de Serbia de aceptar cierta autonomía en algunas zonas del norte serbio de Kosovo, el ministro dijo que no cambia la posición española de no reconocimiento de la independencia de la provincia de mayoría albanesa, e insistió en que, en cualquier caso no tiene nada que ver con casos probables de secesión dentro de la UE, que están en el artículo cuarto de los Tratados, que establecen la salida inmediata del territorio europeo.