Empresarios separatistas instan al boicot de la deuda española

Círculo Catalán de Negocios (CCN), una asociación que que agrupa a más de un millar de empresarios catalanes defensores de la independencia de Cataluña, ha elaborado un informe en el que instan a no comprar deuda española, acusan al Estado de actuar en connivencia con el sector bancario en la estafa de las preferentes y avisan de que existe una alta probabilidad de «default» (bancarrota) del sistema económico español.

CCN, creado en 2008 con la finalidad de defender un Estado propio catalán, está presidida por Ramon Carner, empresario de San Feliu de Codines (Barcelona) que en las elecciones autonómicas de 2003 se presentó en la lista de ERC en este municipio. El informe, que esta asociación distribuye a través de su página web, se titula «Más burbuja financiera española» y en el mismo se ofrece un panorama catastrófico de la economía española.

«El consejo de CCN a los inversores catalanes es que ninguna manera inviertan en deuda pública porque hay una alta probabilidad de “default” del sistema económico español», afirma esta entidad, tras asegurar que esta deuda está «a un paso de ser considerada bono basura». Añade que «los bancos sistémicos», tras el rescate europeo (40.000 millones de ayuda europea en 2012, recuerdan) siguen comprando deuda pública. «Cogen el dinero al 1,75% y lo ponen en bonos del Estado al 5%, el negocio es redondo. Redondo como era para los bancos chipriotas comprar deuda griega con los depósitos de los ahorradores. lo que ha pasado es lo que tenía que pasar, es sólo otro de los motivos por los que la banca sana es la menos sana»

«La oligarquía española, con su banca al frente, ahora intenta tapar el agujero de los bancos con una nueva maniobra, reducir por ley el máximo interés de los depósitos bancarios al 1,75% y ofrecer una rentabilidad más alta con deuda pública española». Afirma que el Gobierno español necesita colocar 240.000 millones de euros en deuda pública, cifra similar a la del vencimiento de los depósitos a plazo del sistema financiero español en 2013 un total de 280.000 millones.

Asimismo, acusan al Estado de permitir por ley «una serie de posibilidades a las entidades financieras para pagar mucho menos o no pagar nada a los pequeños ahorradores afectados por unas prácticas bancarias irregulares, que infringen normas legales, sin ninguna actuación por parte de las autoridades que se encaminen a su corrección y sin sanciones pertinentes, en todos estos años de crisis-estafas y de burbujas inmobiliaria, financiera y de la deuda». Concluye el informe del CCN que «el sistema financiero español, que en su día aconsejó comprar acciones de Bankia, ha llevado a los clientes de preferentes a la pérdida absoluta:¡lo han perdido casi todo!».