Elecciones europeas | Análisis
Diez conclusiones del 25-M
Aunque PP y PSOE se llevan un varapalo, los populares mantendrán el rumbo y los socialistas deben virar ya
Frente al tradicional complejo ibérico de país poco ejemplar, se abre paso una primera lectura del 25-M : nuestro país se erigió ayer como uno de los más moderados y estables, en el contexto de un terremoto político sin precedentes en Europa. Así se votó en España:
Los extremismos suben y el bipartidismo se resiente . Fuerte desgaste de PP y PSOE, que solo suman el 49% del voto frente al habitual 80%. Sin embargo, las alternativas radicales distan del éxito de la derecha y/o izquierda en Grecia, Dinamarca, Reino Unido y, sobre todo, Le Pen en Francia.
Fragmentación: diez partidos con escaño. Precisamente, es la dispersión del voto hacia muchas opciones alternativas la que permite aguantar distanciados de los demás a los dos grandes partidos, pese a su caída al 26% (PP) y 23% (PSOE) . Por primera vez, diez formaciones españolas logran representación parlamentaria en unos comicios europeos.
La campaña y la movilización en Cataluña frenan la abstención. Lejos del peor augurio, cercano al 40% de participación, la sociedad española más despegada de la política en décadas no votó menos que en 2009, aunque con el matiz de un fuerte aumento del voto nacionalista en Cataluña.
Rajoy acusa el desgaste, pero gana en su peor escenario. Su victoria le mantiene con opciones intactas para las generales de 2015. El presidente del Gobierno, junto con Merkel el único líder europeo de un país importante que vence en las urnas , cuenta con una previsible recuperación de voto los próximos meses si se consolida la recuperación económica.
Punto final para Rubalcaba y catarsis a la vista en el PSOE, que pierde voto por el centro y por la izquierda . El partido va a acelerar una renovación que no por prevista va a ser un verdadero terremoto interno. El mal resultado de Valenciano lanza al partido hacia las primarias para elegir candidato en 2015 y, probablemente también, para descabalgar a Rubalcaba de la secretaría general del PSOE.
El independentismo de CiU premia a ERC. Los convergentes de Artur Mas prosiguen con su pérdida de apoyo y ceden ya el primer puesto en votos a Esquerra por primera vez en Cataluña. Es el precio a una política radical que no comparte todo su electorado.
El fenómeno televisivo Podemos también resta voto a IU. La formación de Pablo Iglesias, con apoyo mediático en tertulias, es la que más se acerca al populismo de corte europeo, aunque es de izquierda radical, en buena medida con apoyo de miembros del movimiento 15-M. Desencantados frente al establishment (IU también lo es), hacen de Podemos una preocupación para Cayo Lara.
UPyD roba votos al PP, pero más lo hace la abstención. Buen resultado de la formación magenta, que se lleva votos de PSOE y PP. Sin embargo, a falta de un análisis de más profundidad, el alto porcentaje de abstención permite pensar en que su recuperación tendrá que llegar por ahí.
El PP mantiene una debilitada hegemonía territorial frente al PSOE. En Madrid, Comunidad Valenciana y Castilla-La Mancha, los populares pierden terreno pero siguen distanciando al PSOE en 8/10 puntos. Su hegemonía no está en duda, otra cosa será su mayoría absoluta en 2015.
Bildu y su parroquia proetarra no fallan. Los Pueblos Deciden, donde se encuentra Bildu, logró su europarlamentario, lo que demuestra que la abstención siempre le afecta menos.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete