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JUEGOS OLÍMPICOS | TENIS

Londres 2012: Murray despierta a Almagro del sueño

El murciano, muy dolorido en su hombro derecho, se despide de los Juegos en cuartos al perder contra el héroe local

Londres 2012: Murray despierta a Almagro del sueño

enrique yunta

Andy Murray frenó en seco las aspiraciones de Nicolás Almagro , el mejor español en los Juegos Olímpicos de Londres y que se despide en cuartos de final. Castigado en el hombro derecho, tratado con antiinflamatorios y pastillas desde que empezó el torneo e incluso antes, el español no pudo ofrecer resistencia al ídolo local. Una derrota con dolor en menos de una hora.

Murray es una eminencia en el All England Tennis Club por mucho que no haya ganado nunca aquí, señalado por todos como el encargado para destruir el maleficio. Desde 1936 que un británico no vence un grande y, aunque esto no lo sea, se asume como tal. Murray está en la lucha por las medallas y se emociona su gente .

Fue superior a Almagro, más acostumbrado a la hierba, cómodo en unas pistas que empiezan a notar los excesos. Al español nunca le había ido demasiado bien en el verde de Londres, pero se ha destapado esta semana con una actuación meritoria después de eliminar a Troicki, Bogomolov y Darcis. De victoria en victoria hasta cuartos, su destino final.

El partido lo marcó el servicio de Andy Murray, tremendo el escocés con su saque . Firmó juegos perfectos (15 aces) y mareó a Almagro, incapaz de descifrar la trayectoria, mermado físicamente como para devolver los cañonazos. Tanto que sólo sumó tres puntos al resto en el primer set, insuficientes para plantar cara a un tenista de la magnitud de Murray. Un 6-4 indiscutible.

Almagro, desquiciado por los dolores, necesitó tratamiento médico y retomó el partido contrariado . Para empezar la segunda manga, rotura definitiva. Almagro perdió el saque y con él se fue la ilusión olímpica, enfadado hasta el punto de lanzar la raqueta porque las cosas no salían como quería.

A Murray le bastó con mantener el tono , tranquilo porque la renta era cómoda si seguía sacando tan bien y porque volvió a quebrar. No hubo manchas en su hoja de servicio y levantó los puños para animar a los británicos, más ilusionados que nunca. Él sigue soñando mientras Almagro despierta.

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