educación
El Ayuntamiento no desalojará el colegio San Ildefonso si los informes garantizan la seguridad
Esta semana se emitirá el segundo informe, por lo que los padres sabrán si se pueden acometer las obras por fases, una opción que Ana Botella respalda
Hace ya un mes aproximadamente que los padres del colegio público San Ildefonso (en La Latina) se sorprendieron leyendo en los medios de comunicación que era necesario desalojar a los niños por fallos estructurales en el edificio que ponían en riesgo la seguridad de los menores.
Los padres aseguran que el colegio está en buenas condiciones, por lo que, desde entonces, han emprendido una lucha para que sus hijos no tengan que ser trasladados a un centro educativo a 12 kilómetros del San Ildefonso, en el barrio del Pilar. Consiguieron ver el informe –realizado por la misma empresa constructora que tiene la concesión de la reforma– y vieron que las aseveraciones sobre el estado del colegio estaban «infladas, exageradas», según explica Andrea Arabia, madre de uno de los niños afectados.
Arabia asegura que la seguridad de los pequeños es vital: «Si nosotros viésemos que hay un mínimo riesgo para nuestros hijos, seríamos los primeros que querríamos que se reformase. Pero es que está en buenas condiciones , teniendo en cuenta que es un edificio antiguo».
Con esta postura coincidió la consejera de Educación y Empleo, Lucía Fígar , quien afirmó el pasado jueves en el Pleno de la Asamblea de Madrid que el primer informe emitido por el Ayuntamiento de Madrid era «excesivamente alarmista» . Por ello, decidió que se realizaría un segundo informe para determinar si es necesaria la reforma y de qué envergadura.
Esta mañana, algunos padres se han reunido con la alcaldesa de Madrid, Ana Botella , quien descartó que se fuese a llevar a cabo una reforma integral. Botella ha tratado de tranquilizar a los padres y les ha dicho que entre el jueves y viernes de e sta semana conocerían lo determinado por el segundo informe del Ayuntamiento. No obstante, la Asociación de Padres y Madres ya se encargó de elaborar uno de manera independiente. Para ello, contrataron a varios arquitectos expertos en Patrimonio y edificios antiguos, quienes determinaron que «no hay ningún peligro» y que en el primer informe había «cálculos mal hechos», según reconoce Magdalena Queipo, una de las madres y también abogada.
Botella, además, ha asegurado a los progenitores que se hará lo que sea «estrictamente necesario» y que en el caso de que se requieran obras, estas, posiblemente, se harán por fases para que no sea necesario desalojar a los niños ni interrumpir el curso escolar.
Noticias relacionadas
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete